“Su cargo como responsable de inteligencia civil es incompatible con cualquier investigación judicial y con el mismo aparato de justicia del país”, afirmó el presidente Petro.
Informe: Luis Ángel Terán
En horas de la mañana de este viernes 26 de julio, renunció el director de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), Carlos Ramón González, por los señalamientos realizados el día anterior en la audiencia de imputación contra Olmedo López y Sneyder Pinilla, en el curso de la investigación por el entramado de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, UNGRD.
La dimisión de González se da posterior a las acusaciones hechas por la Fiscalía tras las declaraciones de los exdirectivos de la unidad, quienes mencionaron que el alto funcionario del Gobierno, siendo en ese entonces director del Dapre, les entregó 4.000 millones de pesos para que se lo dieran como coimas al Iván Name y Andrés Calle, para ese entonces presidentes del Senado y Cámara respectivamente.
Coordinó usted señor Olmedo, con Sneyder Pinilla, la entrega de 3.000 millones de pesos al entonces presidente del Senado, Iván Leonidas Name Vásquez, a través de Sandra Liliana Ortiz Nova, quien para la época de los hechos era la consejera para las regiones de la Presidencia de la República; y la entrega de 1.000 millones de pesos directamente al presidente de la Cámara, Andrés David Calle Aguas, conforme a las instrucciones que le dio Carlos Ramón González Merchán, quien para ese momento se desempeñaba como director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre)”, mencionó la fiscal en la diligencia del pasado jueves.
Ante esto, Carlos Ramón González había manifestado horas después que su inocencia era “irrefutable”, asegurando que “jamás” ordenó a alguien “cometer delito alguno”.
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En el día de hoy, este decidió apartarse de su cargo y comunicar al presidente Petro su decisión, la cual fue aceptada por el jefe de Estado y que hizo pública refiriendo en su cuenta de X con el siguiente mensaje:
“Acepto la renuncia de Carlos Ramón, director de la Dirección de Inteligencia Nacional. Su cargo como responsable de inteligencia civil es incompatible con cualquier investigación judicial y con el mismo aparato de justicia del país. Para tranquilidad de fiscales y jueces, para su independencia y buen juicio y para la misma labor de defensa de los abogados de Carlos Ramón, lo mejor es la separación de su cargo”, señaló Petro.
