El expresidente de Colombia se refirió al tema luego de las confesiones de distintos exmiembros del Ejército sobre sus responsabilidades ante estos hechos.
Luego de las confesiones de distintos excomandantes del Ejército Nacional ante la JEP sobre distintos casos cometidos y que fueron presentados como falsos positivos durante el período de gobierno del expresidente Álvaro Uribe Vélez, este se refirió al asunto y sostuvo que nunca fue indiferente ante las denuncias por violación de los derechos humanos.
“Siempre fui exigente como la opinión pública lo percibió en los consejos de seguridad que se transmitían por la televisión. Ser exigente era mi deber en un país y en departamentos como el Casanare, donde narcoguerrilas y narcoparamilitares asolaban a la ciudadanía. Nunca fui pasivo ante las quejas de las violaciones de derechos humanos, por eso nuestras circulares de transparencia”, dijo a través de un video el exmandatario.
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En esa línea, y en discrepancia con lo que afirmaron en sus confesiones los altos mandos retirados de la fuerza pública al decir que tenían ordenes de presentar personas muertas haciéndolas pasar como miembros de la guerrilla, el expresidente señaló que dentro de las políticas de su gobierno esas ordenes nunca se suscitaron, y por el contrario, era tajante al ordenar que los cuerpos de crímenes de guerra no fueran movido o alterados para facilitar las investigaciones.
“Nuestras acciones empezaron en el inicio de nuestro gobierno, con la exigencia a los integrantes de las Fuerzas Armadas de no mover los cuerpos de personas dadas de baja, y siempre esperar que llegara la Fiscalía a efectuar el levantamiento”, precisó Uribe Vélez.
el exjefe de Estado de los colombianos finalizó su mensaje diciendo que en su mandato ejecutó diferentes acciones para proteger los derechos humanos, dada vez que “en 2006 pedí a la justicia penal militar que fuera la Fiscalía con la justicia ordinaria las que investigaran los asesinatos de Policías por soldados en Jamundí”, así como la destitución de distintos altos oficiales “que estuvieron comprometidos en responsabilidades administrativas o penales en casos de los llamados falsos positivos”, pero criticó que la JEP brinde libertad por confesar dichos delitos.
“Muchos de los responsables de falsos positivos fueron a la cárcel. Y cuando nunca reconocieron el delito, ahora lo reconocen ante el incentivo de libertad que les ofrece la JEP”, puntualizó.