Según el jefe de Estado, esta transformación permitiría redistribuir la carga del pago entre los dueños de vehículos de diferentes características.
El presidente Gustavo Petro lanzó una propuesta que ha generado debate en los últimos días; transformar el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT) en un impuesto y modificar la forma en que se calcula su valor, con el objetivo de introducir mayor equidad y reconfigurar su financiamiento dentro de las finanzas públicas.
Durante una alocución oficial el pasado 23 de diciembre, el mandatario explicó que su Gobierno pretende que el SOAT deje de regirse como un esquema tradicional de seguro dentro del sector asegurador y pase a estructurarse como un tributo administrado por el Estado. Según Petro, esta transformación permitiría redistribuir la carga del pago entre los dueños de vehículos de diferentes características.
Bajo la propuesta presidencial, vehículos de mayor valor o de alta gama, como los automóviles particulares de cuatro puertas, pagarían tarifas más altas, mientras que motocicletas de bajo cilindraje y automotores más pequeños pagarían menos.
El argumento del Ejecutivo es que el sistema actual, basado en la siniestralidad, ha generado inequidades, ya que las motos, aunque son las más involucradas en accidentes, acabarían pagando proporcionalmente más en un modelo injusto, según Petro.
La iniciativa ha sido presentada dentro del contexto de la declaración de emergencia económica por parte del Gobierno, con el fin de atender un déficit presupuestal y recursos necesarios para programas de salud y otros servicios públicos. Petro ha señalado que la reforma del SOAT forma parte de una estrategia más amplia de ajustes tributarios para cerrar brechas de financiación y responder a mandatos de equidad, incluyendo órdenes de la Corte Constitucional.
La propuesta, sin embargo, no ha estado exenta de cuestionamientos. Representantes del sector automotor han expresado inquietudes por los posibles incrementos en el costo del SOAT para ciertos vehículos, mientras que otros han señalado la necesidad de mayor claridad técnica y social sobre cómo afectaría a los propietarios de motos, carros familiares y otros segmentos.
Adicionalmente, analistas recuerdan que cambios previos en la estructura del seguro, como la modificación de coberturas y tarifas en años anteriores impulsadas por decretos gubernamentales, generaron polémica sobre su impacto en los recursos de salud y en las finanzas del sector asegurador.
La iniciativa ahora está en manos del Ministerio de Hacienda, que evaluará la viabilidad técnica y fiscal de convertir el SOAT en impuesto y definir la mecánica de cobro basada en el cilindraje y otros factores. Hasta el momento, no hay un cronograma oficial de cuándo podrían presentarse propuestas de ley o decretos concretos para implementar este cambio.
