Al menos una de las cuatro víctimas se dedicaría a ese oficio. La recompensa por información sobre los responsables de los hechos ascendió a $100 millones.
El consejo de seguridad realizado en la mañana de este lunes 30 de enero entre la Alcaldía de Barranquilla, la Policía, el Ejército y la Fiscalía terminó con una primera hipótesis sobre los hechos violentos que cobraron la vida de cuatro hombres y dejaron a seis personas heridas en la tienda y estadero Los Seis Hermanos, en el barrio El Santuario de Barranquilla, el día anterior.
El alcalde de la ciudad Jaime Pumarejo dijo al iniciar el consejo que las autoridades responderán “de manera contundente a los hechos violentos registrados anoche en El Santuario” y durante el desarrollo de la reunión se definieron acciones para hacer frente a la inseguridad y violencia en la ciudad.
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Una de las informaciones más relevantes que dejó el encuentro es la primera hipótesis sobre el ataque sicarial perpetrado por cuatro sujetos a bordo de dos motocicletas, cuyos parrilleros descendieron de los vehículos para abrir fuego. Esto indicó el brigadier general Jorge Urquijo, comandante de la Mebar, quien se comprometió en lograr, en tiempo récord, la captura de los homicidas:
“Las primeras hipótesis señalarían que al menos una de las personas que se encontraban allí, que fue víctima, estaría dedicada a la actividad comercial de cobradiario; esta es una de las hipótesis que se recogen a través de entrevistas y labores de vecindario. Esto indicaría que, al parecer, por la confrontación por las rutas de cobradiario se tendría retaliación y se habría registrado este hecho con resultados lamentables“.
El comandante informó que la Policía junto con la administración distrital ofrecen una recompensa de hasta $100 millones por información sobre los delincuentes y recalcó que cámaras del sector lograron captar momentos previos y posteriores a la masacre.
“Serían los parrilleros quienes aprovechando que las personas estaban concentradas en un partido llegaron por la espalda y les propinaron varios disparos a las víctimas; desafortunadamente, en este hecho resultan seis personas más heridas que estaban en el lugar. Estas personas huyen en motocicletas cuyas características ya tenemos”, agregó el comandante.
Diez investigadores técnicos de la Policía y un grupo de comando de operaciones especiales con 20 hombres buscan recolectar material probatorio y dar con la captura de los individuos. Sobre Reinaldo Javier Orozco, policía activo que se convirtió en una de las víctimas mortales, Urquijo indicó:
“El uniformado se encontraba en una situación de suspensión por Medicina Laboral, se encontraba con una excusa, era un policía que estaba en servicio activo, tenía tres años en la institución, estaba laborando en el grupo de Prevención y Educación Ciudadana y sería amigo de las personas que fallecieron en este hecho”.
