Aunque algunas personas creen que el caso no sea real, una mujer contó haber conversado con el hombre “momentos antes de que se lanzara”.
Existe un misterio alrededor del video que ha circulado en las últimas horas a través de las redes sociales donde se observa a un joven que se habría lanzado en la noche del pasado lunes 20 de octubre al arroyo El Salao, en el barrio Terranova, etapa 1, del municipio de Soledad, Atlántico.
Muchos dudan de la veracidad del caso e, incluso, creen que se trata de IA, por varios factores: por la extraña forma en que el joven entró a la corriente y porque a su lado había otras personas, entre ellas, un motociclista que parece no inmutarse ante los hechos.
Sin embargo, Fanny Garavito, residente del sector, aseguró en entrevista para Impacto News que ella habló con el hombre, momentos antes de que se lanzara al arroyo: “Yo hablé con él, yo vi al muchacho, no sé si se iba a tirar, pero él estaba buscando para tirarse o cruzar para allá, yo dije: ‘Papa, papa, ven, ven, ven, papa, ven acá’. Él me hizo caso y llegó a la reja, yo hablé con él y le dije: ‘Papi, ¿tú qué vas a hacer?’, y él me dijo: ‘Estoy viendo a ver si paso’. Yo le dije: ‘No, papa, tú por ahí no puedes pasar’ y me respondió: ‘No, lo que pasa es que no sé nadar, si no, yo me tiro’ y yo le indiqué: ‘No, papa, tú no te puedes tirar, así sepas nadar, porque es un arroyo muy fuerte, peligroso’“.
La ciudadana asegura haberle sugerido al joven que se fuera por la Murillo y lo vio caminar en la dirección que le recomendó; no obstante, pronto habría regresado al mismo lugar.
Garavito aseveró que su nuera fue la que grabó el video: “Yo confié en que el muchacho iba a coger para la Murillo. Jamás pensé que ese niño se iba a quedar ahí pensando otra vez a tirarse en el arroyo porque eso fue lo que hizo, pero yo no me di cuenta de eso, se dio cuenta la nuera mía, ella sabe que yo estuve hablando con él ahí y ella fue la que comenzó a orar y a pedirle a Dios para que el muchacho no se tirara. El muchacho ya eso lo tenía pensado, porque si a mí me dicen algo y escucho, no me hubiera tirado. O tiene problemas mentales o tenía algún problema de familia, de salud o deuda”.

Sobre los rasgos del joven, cuyo paradero se desconoce hasta el momento, la mujer describió: “Él habló conmigo bien y se sonrió conmigo. Él es un moreno alto, tiene el cabello encrespadito como con unas trencitas, tenía tatuajes y una bolsita de crispetas en las manitos. Por ahí yo le pongo que tenía como 20 años“.
Un sentimiento de culpa invade a la mujer, por no haber podido salvar esa vida: “A mí me dolió, no con el ser humano, porque yo soy cristiana. A mí me duele es que esa alma se haya perdido, estuvo donde mí y yo podía sacarle algo, pero yo no sé. Yo le pedí perdón al Señor si algo no hice que verdaderamente debía hacer o, de pronto, Dios me lo puso para que yo lo ayudara y no pude ayudarlo más porque yo confié en que él iba para la Murillo”.
Sobre las personas que se observan cerca del joven, Fanny dijo: “No sé, esos pelaos sería que estarían grabándolo. Usted sabe que ahora la gente se pone a grabar y no ayuda, porque ellos estaban ahí y ellos le vieron la intención al muchacho porque se iba a tirar, era para que lo hubieran ayudado, pero no lo hicieron, no sé por qué”.
Hasta el momento, no hay reporte ante las autoridades sobre la desaparición del hombre. Se espera que en las próximas horas se tenga más información y se esclarezca lo sucedido.
Informe: Yeinner Garcés




