El Auriverde buscaba subir a la A por medio del repechaje, denunciado ante ese organismo de arbitraje deportivo una anomalía que al final permitió que ascendieran Unión y Llaneros.
Por: Iván Peña Ropaín.
Real Cartagena, literalmente, “fue por lana y terminó trasquilado”. ¿Por qué ello? Pues después de siete largos meses y ya jugando en la B y Unión Magdalena en la A, la máxima autoridad en materia deportiva: el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), le respondió que no procede su petición.
El TAS le manifestó que no tenía hacedero la solicitud relacionada con la situación irregular que demandó al final del Torneo de la B 2024, lo que impidió a los cartageneros, dicen ellos, la no disputa del repechaje para definir los ascensos de esa temporada, por lo que terminaron subiendo a la A Unión y Llaneros de Villavicencio.
Mencionándose también que dicho órgano que dirime y que es la última instancia, le informó al Real Cartagena que deberá pagar todo el costo por el servicio que les ofrecieron para realizar dicho procedimiento.
“Imponer la totalidad de los costos del presente arbitraje, los cuales serán comunicados ulteriormente por la Secretaría del TAS, al Real Cartagena Fútbol Club y disponer que cada parte deberá asumir los costos legales y otros gastos en los que haya incurrido en relación con el presente procedimiento”, mencionaron.
