El responsable del abominable crimen sería un adolescente de 17 años, padrastro de la menor.
El Alcalde de Galapa, José Fernando Vargas, lamentó profundamente los hechos registrados en la urbanización Mundo Feliz, en los que un joven de 17 años, presuntamente violó y causó la muerte de su hijastra, de apenas tres meses de nacida.
“Es un hecho repudiable que merece el rigor de la ley para el responsable. Resulta indignante este tipo de situación en la que un joven actúa con salvajismo y crueldad en contra de una bebita que apenas comienza a ver la luz del día”, anotó el mandatario.
“Más indignante aún es que este hecho haya sucedido, precisamente al concluir el Mes del Niño, en el que todos abrazamos a quienes constituyen las nuevas generaciones”, recalcó el alcalde.
El presunto autor material de este aberrante hecho se encuentra detenido y el mandatario pidió a las autoridades competentes, investigar e imponer la ley que requiere un caso como este.
“Es un crimen que merece el castigo y que no puede quedar en la impunidad. El presunto responsable es un menor de edad, según información de las autoridades, pero igualmente debe ser sometido a la ley por tratarse de un claro caso de feminicidio, de una bebita de apenas 3 meses de nacida”, puntualizó.
Sobre este caso, el secretario de gobierno, Luis Oquendo, señaló que, una vez se conoció el caso, se instaló un operativo con la Policía Nacional que permitió la captura del presunto responsable en las instalaciones del hospital local de Galapa, donde la menor había sido llevada por su abuela materna por presentar vómito y fiebre.
Sobre la madre, se pudo determinar que es una mujer mayor de edad que estaba trabajando al momento en que ocurrieron los hechos, según las versiones entregadas por ella.
Las autoridades se encuentran investigando para esclarecer lo sucedido en este caso.
La administración municipal reitera el llamado a padres de familia y tutores sobre la responsabilidad de vigilar y proteger a los niños, también de denunciar inmediatamente ante hechos que representen un peligro para su integridad.
