El reconocido músico neoyorkino de origen puertorriqueño, fue el primer artista latino en ganar un Grammy por una grabación en español.
Eddie Palmieri, el legendario pianista y compositor neoyorquino de origen puertorriqueño, falleció este miércoles 6 de agosto de 2025 en la ciudad de Nueva York, a los 88 años. La noticia fue confirmada por su hijo, aunque aún no se han revelado más detalles respecto a las causas exactas del deceso. Medios internacionales indican que Palmieri habría sufrido un infarto alrededor de las 4:00 p. m.
Desde muy joven, Eddie Palmieri mostró un talento innato para la música. Nacido el 15 de diciembre de 1936 en el South Bronx de Nueva York, en el seno de una familia puertorriqueña, formó su primera orquesta a los 14 años y más adelante fundó el icónico Conjunto La Perfecta en 1961. La agrupación innovó al reemplazar los tradicionales violines de la charanga por una poderosa sección de trombones, creando así un sonido más moderno y contundente que revolucionó el género.
Palmieri fue pionero en fusionar el son montuno y otros ritmos afrocubanos con experimentos armónicos de jazz. Obras como Azúcar pa’ ti, Muñeca, Vámonos pa’l monte, Bilongo, Adoración y Un día bonito se convirtieron en himnos del género salsa, marcando una evolución sonora y estética que trascendió décadas. Además, colaboró con figuras como Cal Tjader en discos como Justicia (1969) y Superimposition (1970), donde incorporó descargas, fusiones y arreglos de jazz latino.
Su legado fue reconocido con numerosos premios: fue el primer artista latino en ganar un Grammy por una grabación en español, con The Sun of Latin Music en 1976, y acumuló un total de nueve premios Grammy durante su carrera. También recibió el prestigioso título de NEA Jazz Master(2013), consolidando su imagen como uno de los grandes innovadores del jazz latino.
Incluso en sus últimos años, Palmieri mantuvo vivo su espíritu creativo. En 2024 continuó activamente en conciertos y grabaciones, a pesar de problemas de salud que lo llevaron a cancelar algunas presentaciones pocos días antes de cumplir 88 años, por indicación médica.
En entrevistas recientes había confesado que su energía seguía intacta y que no contemplaba el retiro, razón por la cual fue homenajeado con el nombramiento de ‘Eddie Palmieri Day‘ en Nueva York en julio de 2024.
Con su partida, la música latina pierde a uno de sus más grandes visionarios, alguien que no solo interpretó ritmos sino que los reinventó y elevó con sofisticación y pasión. Su influencia se extiende a generaciones de músicos y seguidores de la salsa, el jazz latino y más allá. El juicio del salsero Bobby Cruz lo resume bien: “De los grandes, el más grande. Gracias por tanto”.
Este suceso no solo marca el fin de una era, sino que invita a celebrar su legado: sus composiciones seguirán sonando en salseros y educadores musicales, su audacia artística permanecerá como ejemplo de valentía creativa, y su historia seguirá inspirando a quienes buscan dignificar y expandir la cultura afrolatina, a través del arte.
