Una de las víctimas mortales era natural del municipio de Soledad, Atlántico.
Durante la madrugada de este miércoles 19 de marzo, una terrorífica, escalofriante y macabra escena hallaron las autoridades y pobladores de un sector conocido como Casa Loma, entre los límites de Ciénaga y Puebloviejo, jurisdicción del departamento del Magdalena.
Dos hombres, al parecer pescadores, fueron encontrados sin vida en el interior de una vivienda rural. Las dos víctimas registraban evidentes signos de tortura y violencia, incluso, uno de ellos fue decapitado y su cabeza metida en el congelador de una nevera.
Medios locales del Magdalena han informado que cuando los investigadores llegaron al lugar, vislumbraron que la espeluznante escena del crimen había sido cometida por manos criminales despiadadas, pues las víctimas registraban impactos de proyectiles de arma de fuego.
Los cuerpos de los occisos fueron llevados a la sede de Medicina Legal en Santa Marta, donde los identificaron como Wilmar Negrete, de 55 años, oriundo de Soledad (Atlántico), y Darío Alfonso Ariza Palacio, de 62, ambos pescadores de la zona.
Moradores de esa localidad apartada habrían manifestado a la los investigadores judiciales que el espantoso hecho se perpetró en horas de la madrugada, cuando se escucharon fuertes gritos acompañados por una ráfaga de disparos.
En ese momento nadie se atrevió a acercarse hasta el lugar de donde provenían aquellos ruidos y acciones extrañas, y solo fue hasta en la mañana cuando otros pescadores que se dirigían a sus faenas se toparon con la aterradora escena sangrienta.
Investigadores judiciales de la Policía Metropolitana de Santa Marta y de la Fiscalía General de la Nación asumieron, de forma articulada, las actividades investigativas para esclarecer los móviles del asesinato de estos dos hombres y conocer quienes están detrás del macabro suceso.
Informe: Luis Ángel Terán
