El tío de los menores contó que estos fueron llevados a la casa de su madre para que compartieran con ella, allí el padrastro les dio una bebida y galletas.
En la mañana del domingo 4 de diciembre falleció un menor de siete años luego de sufrir una fuerte intoxicación mientras se encontraba en la casa donde convivían su madre y su padrastro en la manzana 56 no. 53-Transversal 6 del barrio Nueva Esperanza, Soledad.
Su hermanito, de solo seis años, quien también resultó intoxicado, se encuentra hospitalizado. Al parecer, los menores ingirieron unas galletas y Pony Malta que les dio su padrastro.
Néstor Romero, tío paterno de los infantes, contó en entrevista con Alexander Ojito, reportero urbano de Impacto News: “Los niños habían salido de vacaciones, mi hermana los estaba criando, se los llevamos a la mamá, los tuvo varios días desde que salieron de vacaciones y el día viernes 2 de diciembre como a las 10:30 para 11:00 p. m. nos dan la noticia de que los niños estaban intoxicados, de que, posiblemente, habían tomado algo que el padrastro les había dado”.
La familia paterna estaba pendiente de la educación y bienestar de los niños, llevarlos a la vivienda de la madre biológica cada fin de semana ya era costumbre. El día de los hechos, a los menores los trasladaron a la Clínica La Misericordia y, posteriormente, a la Clínica Adelita de Char.
“El papá, mi hermano, no tenía relación con la muchacha y tengo entendido que ella se había separado del otro tipo, supuestamente, pero, al parecer, volvieron”, agregó Néstor.
Sobre el menor que perdió la vida, contó con gran dolor, considerando la posibilidad de un presunto envenenamiento: “Él convulsionó, orinó sangre y murió. Yo trabajé más de quince años en un colegio, ateniendo un kiosco escolar en Soledad, cuando mucho una Pony o gaseosa cuando sale mala da un dolor de barriga, pero no da para eso, entonces se me hace extraño, además de que tomaron eso tipo 10:30 p. m., cuando el niño siempre se dormía temprano sin necesidad de mandarlo a dormir”.
Sobre su hermano dijo: “El papá está destrozado, él se llama Adolfo Vanegas y el niño llevaba su mismo nombre. Nunca tuve empatía con la mamá ni con la familia de ella, mi hermano yo sé que ha cometido errores, pero él estaba pendiente de todo, que si la motilada, la ropa, todo”.
Finalmente, pidió a las autoridades que hagan justicia, en dado caso de que no se haya tratado de un hecho accidental, sino intencional por parte del padrastro, quien ya fue interrogado:
“Pido justicia porque no sabemos nada del tipo, no sabemos si está huyendo, me vine a enterar de que él era el sujeto que vivía en la cola del patio y él llegaba a la casa de nosotros, ellos como que salieron enredados ahí, sin embargo, el tipo ya habría alquilado su casa”.
La misma hipótesis es manejada por habitantes del barrio donde ocurrieron los hechos, aunque serán las autoridades las encargadas de esclarecer lo sucedido.
La Policía de Infancia y Adolescencia informó que se adelantan investigaciones sobre el caso, aunque considera que “no es común que alguien se intoxique con alimentos procesados industrialmente”. El CTI de la Fiscalía analiza muestras de la bebida que ingirieron los niños.
Informe: Alexander Ojito – El Ojo de la Calle
