Desde Río 2016 hasta París 2024, el brasileño Joao Maia desafía los límites de la visión con su cámara y su corazón.
Por: Juliana Benavides.
En el vibrante mundo de los Juegos Paralímpicos, hay historias que superan las barreras de lo posible y nos inspiran a todos. Una de estas historias es la de Joao Maia, un fotógrafo brasileño cuya pasión por capturar la esencia del deporte trasciende la vista. A sus 41 años, Maia se ha consolidado como el primer fotógrafo ciego en cubrir estos eventos internacionales, y está listo para dejar su huella en los Juegos Paralímpicos de París 2024.
La trayectoria de Joao Maia en el ámbito deportivo comenzó a brillar con fuerza durante los Juegos Paralímpicos de Río 2016. Su habilidad para registrar imágenes impresionantes de los paratletas, incluidos momentos históricos como el récord mundial de la saltadora Marie-Amélie le Fur, lo catapultó a la fama internacional. Su capacidad para capturar la esencia del deporte sin la ayuda de la vista ha demostrado que, como él mismo dice, “no necesito ver para fotografiar, tengo los ojos del corazón”.
Joao Maia perdió la vista a los 28 años debido a una uveítis, una condición inflamatoria que afecta la úvea. Aunque su visión se vio reducida, el brasileño no permitió que esto detuviera su pasión por la fotografía. En lugar de ver el mundo a través de una lente, Maia lo siente con todos sus sentidos. En eventos deportivos donde el silencio es obligatorio, como el Goalball y el fútbol, puede escuchar el sonido del cascabel en el balón, lo que le permite anticiparse a las jugadas y capturar momentos únicos.
“Para mí, la fotografía es una forma de sentir, de usar el sentido de la audición y la sensibilidad para captar lo que otros pueden pasar por alto”, explica Maia. Su enfoque y dedicación le han ganado el respeto y cariño de sus colegas en el mundo de la prensa deportiva, quienes a menudo mencionan cómo su trabajo ha cambiado su visión sobre la profesión.
Ahora, mientras continúa en los Juegos Paralímpicos de París 2024, Joao Maia ha compartido un emotivo mensaje en sus redes sociales, agradeciendo el apoyo de sus seguidores y expresando su entusiasmo por capturar la esencia de cada atleta en la competencia. “Voy con el corazón abierto, llevándome conmigo toda la fuerza y energía que siempre me envían. Estar allí será mucho más que solo fotografiar; es capturar la esencia de cada atleta, sus luchas, victorias y emociones. Cada clic se hará con los sentidos y el corazón, buscando inmortalizar momentos que inspiran y transforman. ¡Cuento con su apoyo en este viaje! Caminemos juntos, corazón a corazón”, escribió.
La historia de Joao Maia es un poderoso recordatorio de que los límites están en nuestra mente, y que con pasión y determinación, se pueden superar incluso las barreras más grandes. En los Juegos Paralímpicos, Maia no solo captura imágenes, sino que inmortaliza la increíble capacidad humana para superar adversidades y alcanzar sueños.
