¡Se vale soñar con ver a Junior en la final de Sudamericana en Barranquilla!: ¿qué debería pasar para hacerlo realidad?

Hay varias vías para cristalizar ese sueño en el que se han adentrado muchos junioristas tras conocer que la Arenosa será la sede de la final de la Copa Sudamericana en 2026.

Por: Iván Peña Ropaín.

Por la cabeza de muchos junioristas se ha empezado a dibujar el que Junior de Barranquilla enarbole y celebre la Copa Sudamericana 2026 en su cancha y en su terruño, todo ese sueño suscitado luego de que la semana pasada la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) oficializó a Curramba la Bella como la sede de la final de ese certamen continental para 2026.

Y tal como reza aquel adagio popular: “Soñar no cuesta nada”, se puede aplicar en este anhelo del adepto ‘rojiblanco’, ya que en estos momentos ocupa la casilla seis de la tabla de reclasificación, y por cómo se está moviendo la misma con equipos que están por encima de él, ese puesto lo metería en fase previa.

Empero se sabe que en el sentir hoy del seguidor del equipo ‘quillero’ está el ser campeón de la Liga Betplay-II, lo que lo inhibirá inicialmente de ir a la Sudamericana, puesto que el conquistar el título del principal campeonato colombiano lo catapultaría de forma directa a la fase de grupos de la Copa Libertadores 2026.

Aunque es de recordar que por medio de la apodada “gloria eterna” se podrá calar a la bautizada “la otra mitad de la gloria”. ¿Y cómo es eso? Si el club que afronta la Copa Libertadores queda eliminado en la fase de grupos con miras a la etapa de octavos de final, el acabar tercero en su cuadrangular le dará la opción de pasar directamente a los octavos de final de la Copa Sudamericana.

Es decir, si al Junior de Barranquilla se le cristaliza este “orate” pero nada descabellado sueño, y todo le sale como se explicó en el párrafo anterior, estaría a tres compromisos de pisar la final de la Copa Sudamericana del próximo año, la que se cumplirá el sábado 21 de noviembre en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez.

Así va la tabla de reclasificación