La presentadora recordó que hace años también violaron su intimidad y se quedó callada.
La presentadora de televisión y productora Ana Karina Soto y su esposo, el actor Alejandro Aguilar, denunciaron que desde hace semanas vienen siendo víctimas de ciberdelincuentes que hackearon las cámaras de seguridad de su vivienda.
Los victimarios les enviaron inicialmente un correo electrónico con el asunto “Te observamos” y un video de Soto en el vestier. Después, comenzaron a mandarles más material, incluso, luego de que ellos colocaran la denuncia ante las autoridades.
En el inmueble residen junto a su hijo, un menor de edad. La pareja publicó un video en su cuenta de Instagram donde explica lo que les ha sucedido e invita a las personas a denunciar.
“Hemos recibido algunos correos que contienen material de momentos de nuestra vida privada, íntima, secreta, como cada uno de ustedes la tiene, por eso como familia nos sentimos con necesidad de compartir con ustedes esto que nos está pasando porque, seguramente, muchos de ustedes en sus casas tienen un sistema de seguridad y tal vez, Dios no lo quiera, está siendo violado”, dijo Aguilar.
El hombre tildó como algo “enfermo” lo que les están haciendo y manifestó su preocupación por la privacidad de su esposa y de su hijo, especialmente.
“Así como nuestra intimidad fue violada, la de mi chica también fue violada y estoy totalmente seguro que es muy doloroso para una mujer y por eso nosotros no podemos seguir siendo cómplices de este tipo de situaciones”, expresó, pidiéndole a los hombres que no apoyen estas conductas.
El actor también explicó que consideraron importante colocar cámaras en su vivienda para estar pendientes de su hogar y de su niño cuando ellos estuviesen trabajando.
Ana Karina aseguró que el contenido ha sido compartido en varias plataformas: “Nosotros hemos recibido este material a través de los correos de nuestros momentos en familia, pero además, sabemos que está circulando a través de una aplicación que se llama Telegram y seguramente en otras redes sociales“.
Además, invitó a las personas que pasen por la misma situación a denunciar y a quienes tienen cámaras en su vivienda les aconsejó: “Nos dijeron que las IP de las cámaras estaban públicas y por eso tuvieron acceso fácil, revísenlas, revisen el código QR para que no les pase lo mismo que nos está pasando a nosotros”.
Finalmente, la presentadora recordó que hace años también violaron su intimidad y se quedó callada, pero en esta ocasión se atrevió a hablar sobre la situación.
