La afección física que lo aqueja, de acuerdo al galeno, si bien no le inhibe correr o brincar, le quita potencia de arranque.
Por: Iván Peña Ropaín.
Cuando finalizó el fatídico primer semestre del 2023 para Junior de Barranquilla, yéndose prematuramente de la Copa Sudamericana y quedando eliminado en la última fecha de la opción de meterse a los cuadrangulares finales de la Liga Betplay-I, entre los que pedían muchos relegar del equipo por su rendimiento futbolístico, claro está, se encontraba Carlos Bacca, cuyos números fueron paupérrimos, anotando un gol en 16 partidos que disputó.
Tal situación, sumada a que durante varios de los compromisos que jugó mostró falta de efectividad desperdiciando dianas cantadas, situación que no solo lo desesperaba a él sino al juniorista que desde las gradas manifestaba que “ya el atacante porteño cumplió su ciclo”, lo llevó a ser “objetivo” del DT Hernán Darío ‘Bolillo’ Gómez para desistir de él de cara al segundo tramo de la temporada que cursa en el balompié patrio.
Pero, parece ser, que su salida de la institución de los barranquilleros y aquellos costeños que son junioristas no vendría tanto por una decisión técnica, sino por una médica, dejando tal sensación las palabras dadas por el médico del Tiburón, el doctor Javier Fernández, al medio deportivo El Ámbito.
“El tema de Carlos es un tema a tratar. Yo vengo a conversar con él (Bacca) y los directivos del club, es un tema delicado porque Carlos tiene un inconveniente en una de sus rodillas. Queremos que juegue, queremos que sea el Carlos Bacca que todos hemos visto, pero hay inconvenientes motores que no tienen que ver con él ni con su actitud, la cual es muy buena. Él quiere seguir entrenando para el alto nivel, pero me parece tenemos que conversar y detenernos a pensar para procesar la información que tenemos respecto de Carlos”, fueron las primeras palabras del galeno ante dicho medio de comunicación barranquillero.
Agregó seguidamente: “Él está entrenando normal, sin problemas y con buenos resultados, pero lo que tiene sí lo puede limitar en su rendimiento, pues tiene una lesión irreversible, un desgaste que si bien le permite hacer muchas cosas como correr, brincar, lo afecta en su velocidad de reacción, perdiéndose cuando hay este deterioro en la rodilla. Carlos Bacca puede hacer test físicos de carrera de salto y fuerza, y los va a responder muy bien, pero de ahí a la situación de repentizar, de tener velocidad, esa potencia de arranque para cambiar de dirección, está por verse”.
Por último, Fernández indicó que este asunto es un tema que hablará en las próximas horas o días con el jugador, el adiestrador ‘Bolillo’ y el máximo accionista del Rojiblanco, Fuad Char, sentenciando respecto a si hay algún método de recuperación para quien tiene en su dorsal el 70 en el Tiburón, buscándose recupere el protagonismo en el equipo del que es hincha e ídolo: “En este momento, la ciencia no tiene respuesta para saber qué hacer”.