Familiares no se explican por qué le quitaron la vida y afirman que tenía pocos días de estar viviendo en el barrio San Roque junto a su pareja sentimental.
Como Yorwin René Medina Blanco, de 17 años, fue identificado el adolescente de nacionalidad venezolana que perdió la vida el pasado jueves 10 de octubre, en la calle 37 con carrera 38, barrio San Roque, en el centro de Barranquilla, al parecer, producto de una acción sicarial.
Familiares contaron que los hechos son materia de investigación pues ocurrieron en extrañas circunstancias, afirmando que este no tenía cuentas pendientes con nadie y fue un hombre quien sin motivos le disparó, cuando este caminaba posiblemente por una de las calles del barrio al que había llegado hace poco.
“Él vivía en San Roque porque se comprometió con una muchacha y trabajaba en una peluquería cerca, pero casi no conocía el barrio ya que venía de La Chinita. Lo que supe es que la mujer salió a lavar una ropa y él salió a caminar un rato por los alrededores y alguien como que iba obstinado y se le dio por matarlo”, dijo la madre de crianza del occiso.
Yorwin René alcanzó a ser auxiliado y trasladado gravemente herido hasta el Hospital General de Barranquilla, donde unos 15 minutos después de entrar a labores de reanimación se produjo su deceso.
La allegada del joven asesinado aseguró que este era “muy querido” en el barrio La Chinita, pero se había mudado para San Roque porque su madre biológica lo estaba ayudando económicamente cuando decidió unirse con quien sostenía una relación sentimental.
“Él se mudó para San Roque porque la mamá le brindó la ayuda, le pagaba la pieza donde se estaba quedando, no conocía el sector muy bien y por ahí eso es algo peligroso. Como dice el dicho que el que no la debe no la teme y por eso el salía normal. Yorwin era barbero, un buen muchacho y trabajador, querido por todos”, agregó la familiar.
Por último, pidió a la justicia celeridad en las investigaciones que permitan esclarecer los motivos y circunstancias que rodearon el homicidio, recalcando que el adolescente no tenía problemas o cuentas pendientes con nadie.
Informe: Alexander Ojito – El Ojo de la Calle
Redacción: Luis Ángel Terán
