El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar rechazó el hecho atroz e informó que en el inmueble donde vivía la pequeña residía otro menor, cuyos derechos están siendo restablecidos.
Hay consternación a nivel nacional por la atroz muerte de una bebé de tan solo un mes y 16 días de nacida, el pasado 11 de diciembre en Soacha, Cundinamarca. La pequeña fue llevada por sus padres hasta el Hospital Mario Gaitán Yanguas, allí los galenos confirmaron que ya no tenía signos vitales.
Julián Sánchez Perico, alcalde de Soacha, reveló que, a partir de una evaluación clínica, se habría determinado que la bebé fue víctima de abuso sexual y físico, por lo que los padres de la menor están siendo custodiados por las autoridades serán presentados ante la Fiscalía General de la Nación.
“Lamento y me llena de rabia y dolor lo ocurrido a una pequeña de tan solo dos meses en nuestra ciudad. Nunca, aquí ni en ningún lugar del mundo, debería ocurrir un hecho tan atroz como este. Desde ya, como padre, como ciudadano y como alcalde, he solicitado a las autoridades y a la justicia, total celeridad en las investigaciones, así como el peso de la ley. (…). De acuerdo a los reportes, la pequeña que llegó sin signos vitales al Hospital Mario Gaitán Yanguas, fue víctima de abuso físico y, presuntamente, abuso sexual”, lamentó Sánchez.
Ante este doloroso hecho, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, también se pronunció: “Bienestar Familiar expresa su repudio absoluto ante la muerte atroz de una niña de un (1) mes y dieciséis 16 días de nacida en Soacha. Una vez conocida la situación, un equipo interdisciplinario de Defensoría de Familia activó el protocolo de atención”.
El ICBF también informó que, en articulación con las autoridades y entidades competentes, en respuesta a los hechos presentados, se ordenaron las correspondientes acciones tendientes a la verificación y restablecimiento de los derechos de otro menor, de 14 años de edad, que compone el hogar.