Otras informaciones en Inglaterra advierten que siempre fue fanática del West Ham.
Por: Iván Peña Ropaín.
Uno de los hechos que ha movido la esfera noticiosa en el mundo este jueves 8 de septiembre ha sido el fallecimiento a sus 96 años de Elizabeth Alexandra Mary, conocida en todo el planeta como la Reina Isabel II, monarca británica que asumió el reinado en 1952 tras la muerte de su padre Albert Frederick Arthur George, el Rey Jorge VI, asumiendo ella por 69 años el mando.

Entre todas las gamas de la vida social en las que se movió la Reina Isabel II, el campo deportivo, y más precisamente el fútbol, también fue de suma importancia para la exmáxima soberana británica del Palacio de Buckingham, en Londres.

Durante su reinado vivió varios eventos futboleros como el Mundial de Suiza 1954, presenciando 12 años después el campeonato mundial conseguido por su Selección Inglaterra en la Copa Mundo de 1966, celebrada en suelo inglés.
En esa oportunidad ella misma fue quien entregó el trofeo a los campeones, dándoselo en sus manos al entonces capitán Bobby Moore.

Otra de sus apariciones en el mundo deportivo la hizo en las ceremonias de inauguración y clausura de los Juegos Olímpicos Londres 2012, robándose todas las miradas tras ser escoltada por el siempre recordado británico James Bond, aquel famoso Agente 007 de las películas de ficción, en una puesta en escena llevada a cabo en el estadio de la capital inglesa, donde juega West Ham.
Le llamó mucho la atención el fútbol, tanto que, según información que manejaba la prensa en esa nación europea, Isabel II siguió y apoyó férreamente al Arsenal por más de 60 años, confirmando tal fanatismos en 2007 cuando la plantilla de The Gunners, liderada en ese momento por el entrenador Arsene Wenger, fue recibida con todos los honores por la Reina en el Palacio de Buckingham.
Aunque otras informaciones apuntan a que en la década de los 60 era fanática, de esas que siguen los partidos por tv, del West Ham.

Se dice también que al interior de la familia de la realeza existen divisiones con respecto al fútbol, que aparte de su fanatismo al Arsenal, otros miembros como el príncipe Carlos, heredero del trono, es un declarado seguidor del Burnley. También, el príncipe Guillermo de Cambridge ha manifestado su afecto por el Aston Villa, mientras que los príncipes Enrique y Harry, al igual que su abuela, han declarado su atracción por la casaca del equipo que tiene como escudo un antiguo cañón (Arsenal).