“No salí del país para evadir a la justicia, decidí dedicarle tiempo a mi familia”.
El ex senador Arturo Char habló por primera vez para un medio de comunicación desde que anunció su retiro del Congreso de la República luego de ser señalado como determinador del entramado de corrupción electoral por la también exsenadora Aida Merlano, hoy presa e investigada por dichos delitos.
Char decidió en las últimas semanas recusar a los magistrados de la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia que siguen su proceso y aseguró en entrevista para Semana que apeló a tal decisión como herramienta legal para si defensa.
“El reglamento y el procedimiento para la definición de mi situación jurídica en la Corte no ofrece imparcialidad. Me explico: debe haber una sala que investiga y otra que defina. Los magistrados investigadores, al abrir la investigación, adoptaron conclusiones definitivas de responsabilidad. Esos mismos magistrados no pueden definir mi situación jurídica porque ya tienen un prejuicio. Sólo busco que haya un tercero imparcial que, cuando llegue el momento, mire el asunto y decida”, declaró, al preguntársele por que había decidido recusar a los magistrados.
Dijo que este tipo de decisiones no es usual, pero sí relevante, y explicó que si la sala no acepta la recusación, se sorteará una sala de conjueces que definan.
Aseguró que el debate que propone es con todo respeto, y agregó que “vamos a ir al Consejo de Estado con esta controversia jurídica para que se evalúe el reglamento y se garantice la imparcialidad de un tercero a la hora de definir la situación jurídica de un procesado, en este caso yo”.
La audiencia de indagatoria que estaba prevista para este lunes fue aplazada nuevamente, precisamente por el recurso al que apeló el expresidente del Senado, quien subrayó que “en las 122 páginas del auto de apertura de instrucción no hay una sola acusación seria y directa sobre mi conducta o el origen de mis recursos económicos”.
Asegura el exsenador que una sola vez estuvo en la sede política de la exsenadora Merlano, que también era congresista y que lo hizo por una llamada de Julio Gerlein, pero que eso “nada tenía que ver con las elecciones al Congreso”, sino en función de un acuerdo político en la Asamblea Departamental, y afirmó que la única relación que tuvo con Aida Merlano fue la de colegas en el Congreso.
El exdirigente también habló de su salida del país y aseguró que no lo hizo para evadir la justicia, sino porque había decidido dedicarse a su familia como se lo había prometidos a sus hijos, quienes al igual que la madre y él son ciudadanos norteamericanos por lo que residen en Estados Unidos.
“Por fortuna, la ley me ha permitido atender virtualmente todas las diligencias, y así lo seguiré haciendo, poniendo la cara, controvirtiendo las mentiras y defendiéndome con todo lo que la ley me permita. No quiero ser un trofeo en las batallas políticas que seguro vendrán”, apuntó.
Insistió en su inocencia y en que Aida Merlano le ha mentido al país y a la justicia.
