“Es tiempo de que dejen de “satanizar” las apuestas que hizo el gran pelotero”.
Por: Eliexser Pirela
Tal vez sea “llover sobre mojado”, pero indudablemente que Pete Rose debería estar, desde hace muchos años, en el Salón de la Fama del beisbol de las Grandes Ligas, allá en Cooperstown. El béisbol ha cambiado y la perspectiva. La mentalidad de los que eligen a los exaltados al templo de los inmortales del beisbol también debería haber cambiado o, al menos, debió comenzar a cambiar.
Este polémico tema lo vamos a explicar a continuación, haciendo una serie de cuestionamientos que a todos nos deberían poner a pensar sobre este problema.
¿Porqué ahora existe un reloj que controla el tiempo de los lanzadores y los bateadores, a la hora de jugar béisbol? ¿Porqué desde hace poco tiempo existen corredores heredados en segunda base, después del noveno inning, que no tienen ningún otro mérito para estar ahí, sino el haber sido el último out de la entrada anterior? ¿Porqué los receptores y los infielders no pueden cubrir de manera contundente sus respectivas almohadillas, como en otrora? ¿Porqué existe una lista de lesionados especiales “porque hay mucho sol” o “porque hay mucho calor”?
El béisbol ha cambiado muy radicalmente. Todo ello en contra de la propia escencia de este hermoso deporte. Esas interrogantes eran impensables hace 30 años. Pero seguimos con los “Porqués” ¿Porqué el patrocinador más fuerte de la MLB son las casas de apuestas y los casinos? (cosa que antes era impensable) ¿Porqué en cada transmisión de béisbol, ya sea televisión o radio, los anunciantes que más proliferan son los casinos digitales y las casas de apuestas? ¿Por qué siguen manteniendo la mentalidad de dejar por fuera a Pete Rose cuando lo que él hizo es la materia prima del patrocinador más importante, en la actualidad, del béisbol en los Estados Unidos?
Aman lo que “hizo”
No vamos a mencionar las firmas que se han convertido en los sponsors más importantes de la Mejor League Baseball; pero sí debemos comparar lo que estas grandes transnacionales producen para que podamos entender la perspectiva de lo que queremos explicar.
Supongamos que los mayores anunciantes del béisbol sean empresas que producen “Jugo de Naranja” . A Pete Rose lo execraron del béisbol por confesar que tomaba o sigue tomando “jugo de naranja”. Pero si los mayores sponsors son las Líneas Aéreas… A Pete Rose lo desprecian porque afirmó que le “gusta viajar en avión”. Podemos emplear más espacio para dejar más ejemplos, Pero creemos que estos dos son más que contundentes y suficientes.
Argumentos a favor de Rose
Si queremos impulsar la idea de que Pete Rose debería estar o no en un lugar en donde, en teoría, están los mejores beisbolistas, queremos presentar una lista de argumentos, en forma de cifras, que respaldan nuestra postura de creer, de manera clara, que Pete Rose es un genuino miembro del Salón de la Fama y que, en vida, se merece ese reconocimiento.
Pete Rose disparó en su carrera un total de 4.256 hits (más que cualquiera); asombrosamente no le importaba jugar en casa o en la carretera para mantener ese rendimiento, es que en más de 14 mil turnos oficiales dio 2.133 indiscutibles como visitante y 2.123 como Home club (asombran dos cosas, dió más en la carretera y, segundo, en tantos turnos solo existe una diferencia de 10 “jicitos”); en un total de 10 campañas conectó más de 200 incogibles; como el primero en el turno al bate comenzó 305 juegos dando hits (más que cualquiera); lideró el departamento de hits en siete campañas (nadie lo supera); estando su equipo perdiendo, en 123 oportunidades dió el batazo para empatar el juego y en otras 231 veces sus batazos pusieron a ganar a sus equipos (pocos estan cerca de esos números).
Igualmente totalizó 3.085 indiscutibles contra lanzadores derechos y 1.171 imparables contra los zurdos; nadie se enfrentó a más lanzadores, porque le dió hits a 641 diferentes pichers; no sufría de nervios porque conectó 67 hits bateando con las bases llenas; terminó con 63 compromiso disparando cuatro hits y en otros 10 finalizó con cinco indiscutibles; Phill Niekro fue su mayor víctima, al conectarle 64 hits y al equipo al que más daño le hizo fue al de los Bravos de Atlanta, con 486 indiscutibles.
Si en el lugar en donde están los mejores beisbolistas no está el mejor “jiteador” de todos los tiempos, creemos que hay una gran incoherencia.
Es tiempo de que dejen de “satanizar” las apuestas que hizo Pete Rose (porque si apostó, y mucho) y vean con mucho placer y agrado las apuestas que “desean”, con sus miles de comerciales y publicidades, que hagan todos los amantes y seguidores del beisbol.
Es solo para analizarlo.