El exoficial del Ejército mencionó que las ejecuciones judiciales de las que se tiene conocimiento oficial se registraron entre 2002 y 2008, pero antes de eso ya existían.
En el marco de “El Diálogo Restaura: un espacio incluyente”, un encuentro de escucha y diálogo entre el coronel en retiro Luis Fernando Borja, perpetrador confeso de más de 60 casos de ejecuciones extrajudiciales (falsos positivos), y el excomandante de las antiguas FARC, Rodrigo Londoño, conocido en la guerra como Timochenko, el exmilitar entregó detalles reveladores sobre las cifras reales que rondan estos casos y que superarían ampliamente las reportadas oficialmente por la JEP.
“En estas ejecuciones extrajudiciales que ocurrieron en el país, dice la justicia, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), que fueron 6.402 y yo he dicho que pueden llegar a más de 10.000 porque las ejecuciones extrajudiciales a personas civiles, inermes, inocentes, siempre existieron pero con otro nombre. Todos participamos y sabíamos lo que estaba pasando” afirmó el coronel (r) Luis Borja.
Sumado a esta confesión, el exmilitar aseguró este jueves en diálogo con la W Radio que los 10.000 casos de los que hizo referencia se sustentan en los falsos positivos empezaron a darse antes del Gobierno de Álvaro Uribe.
“Esas cifras de 6.402 son de 2002 a 2008, o máximo del 2000 al 2008 (…) pero del 2000 para atrás no han recaudado todos los falsos positivos. Existieron siempre y se llamaron legalizaciones, yo doy cuenta y declaro ante la Fiscalía que desde 1986 yo hice ejecuciones extrajudiciales”, precisó el oficial retirado.
El coronel (r) Luis Fernando Borja es investigado por 62 casos de ejecuciones extrajudiciales y por ello fue condenado a 60 años. Esto sucedió cuando comandó la Fuerza de Tarea Conjunta de Sucre y entre los hechos que se le relacionan está el crimen de 11 jóvenes, a quienes miembros del Ejército que se hicieron pasar por civiles les ofrecieron trabajo en una finca a cambio de un sueldo de $650.000 para luego asesinarlos y hacerlos pasar por guerrilleros.