El hombre, quien vivía en el barrio El Bosque, había estado ingiriendo licor, sin embargo, sus amigos aseguraron que si el conductor hubiese manejado a una velocidad menor, lo habría podido esquivar.
En la noche del viernes 26 de mayo un accidente cobró la vida de Julio Cesar Uribe Fonseca, momentos en que intentaba cruzar la vía en la calle 56 con carrera 9, en límites entre los barrios El Bosque y La Sierrita, en Barranquilla.
El hombre resultó gravemente herido tras ser arrollado por un bus de la empresa Cootragal que cubría la ruta Barranquilla-Galapa y, aunque fue auxiliado y llevado hasta la Clínica La Victoria, allí se registró su deceso.
En entrevista con Alexander Ojito, reportero urbano de Impacto News, el conductor del bus relató: “Venía de viaje y cuando vi al señor encima tiré a frenar, pero el señor cogió para allá, para acá y lo atropellé, el hombre llevaba la botella en la mano, estaba borracho. Yo no me bajé a verlo porque los policías me dijeron que no lo hiciera”.
Esa misma versión fue entregada por otro testigo de los hechos: “El man se le metió, él le sacó el zig zag y el man se le regresó” y en diálogo con amigos del hoy occiso estos confirmaron que había estado bebiendo licor con ellos: “Ahora mismo él llegó allá a tomarse un trago, me lo pidió y yo se lo di”.
Y es que el hoy difunto habría estado ingiriendo bebidas alcohólicas con unos allegados y de ahí se habría dirigido a donde su amigo para que le diera un trago de una botella que tenía, cuando regresaba al lugar donde estaba departiendo inicialmente sucedió el hecho desafortunado.
No obstante, en cuanto a la responsabilidad del accidente, amigos de Julio Uribe Fonseca, quien vivía en la calle 63A con carrera 9 del barrio El Bosque, dicen que el conductor del bus pudo evitar el accidente: “Él estaba en la esquina de Súper Efectivo, los buses venían regateando, si el bus hubiese venido a otra velocidad, lo habría podido esquivar, pero lo arrastró y le destrozó hasta sus partes íntimas”.
Informe: Alexander Ojito – El Ojo de la Calle
