El presidente de ese equipo anda furioso y se dice estaría dispuesto a desistir del tridente: Messi, Neymar y Mbappé, que no ha podido conseguir una Orejona.
Por: Iván Peña Ropaín.
Insaciable ha sido el anhelo del París Saint-Germain por colocar en sus vitrinas la que sería su primera Orejona de su historia. Los esfuerzos de las directivas a la hora de “meterse la mano al dril” han ido en auge a través de los años, creciendo la ambición por ese trofeo continental cuando para la temporada 2017 contrataron al brasileño Neymar, procedente del Barcelona de España, para que hiciera dupla con el francés Kylian Mbappé. Pero, como se ha visto desde ese tiempo para acá, todo ha sido fracaso tras fracaso.
Desde que el presidente de ese club, el catarí Al-Khelaifi, tiró la casa por la ventana al adquirir por más de 200 millones de euros al 10 brasileño, su primera eliminación poseyendo ese dueto (Neymar-Mbappé) fue en la Liga de Campeones 2017-2018, cayendo en octavos de final con Real Madrid.

El sueño de los hinchas del PSG por brillar, al fin, a nivel continental volvió a nacer en la Orejona 2018-2019, pero otra vez tropezaron en octavos, ahora con Manchester United. No obstante, en la siguiente, 2019-2020, el deseo les “pegó en el palo”, y sin el argentino Lionel Messi, al ser subcampeones luego de perder en la final única por cuestiones de la pandemia generada por el Covid-19 ante el mismo club que los eliminó la tarde del miércoles 8 de marzo en la Champions League que cursa: Bayern Múnich.
Superando ese duro golpe, PSG encaró la 2020-2021 con toda la actitud y pudieron avanzar hasta semifinales, cediendo ante Manchester City la posibilidad de jugar su segunda final consecutiva en el torneo de clubes más importante y más competitivo del mundo.

Al-Khelaifi y el grupo de empresarios árabes que están detrás de las finanzas del club parisino conversaron y analizaron que, al estar tan cerca en dos ocasiones de adjudicarse la Champions, esta no se había conseguido debido a que haría falta una última pieza en la ofensiva para conformar un ‘tridente’ letal, pensándose de una en Messi, jugador que no pasaba un buen momento en Barcelona de España.
En otro movimiento multimillonario que llenó las arcas del conjunto culé, París Saint-Germain le desembolsó 400 millones de euros por ‘La Pulga’ para poder ficharlo, logrando después de una intensa negociación la acometida, la cual se pensó traería esa codiciada copa de Liga de Campeones.
En su estreno con el trio ‘Ney-Mba-Mes’, el equipo francés sucumbió nuevamente y frente al conjunto Merengue en octavos de final de la temporada 2021-2022. Casi dejan por fuera al Blanco-Blanco, luego de que el nuevo club de Messi lo derrotara 1-0 en la ida en París y de que en el choque de vuelta en el Bernabéu estuvieran ganando el cotejo 1-0 hasta el minuto 39, marcando en el global 2-0. Sin embargo, varias desatenciones defensivas permitieron que Karim Benzema anotara un inolvidable ‘hat-trick’ al 61′, 76′ y 78′, sentenciando la serie 3-2 (recordemos que para ese entonces ya se había abolido el gol de visitante como doble).

Y el fracaso y la pérdida de la millonaria inversión que hicieron al PSG, como ya vienen diciendo medios en la Ciudad Luz, volvió a tener un nuevo capítulo con su descalabro en la Champions League 2022-2023 que sigue en juego, cuando el miércoles 8 de marzo dijeron adiós en octavos de final por culpa del Bayern Múnich, que lo venció 1-0 en el Parque de los Príncipes y 2-0 en el Allianz Arena.
Dicen que el presidente del PSG está furioso por esta nueva eliminación y por seguir en blanco en Champions, lo que ya lo tiene pensado en dejar de seguir pagando los millonarios sueldos a la plantilla actual, especialmente, a los jugadores sudamericanos Messi y Neymar, vaticinándose que el primero del que desistirían sería del actual mejor jugador del mundo. A Mbappé no lo tocarían porque existiría una multimillonaria negociación a futuro por él con Real Madrid.

Más todavía se habla de la salida del 10 de la Selección Argentina, puesto que se ha ventilado que ha tenido acercamientos con el Barcelona para retornar y hacer su retiro en el club al que ha llamado el “de sus amores”.
En resumen, París Saint-Germain es imbatible con este poderoso tridente futbolístico solo en la Liga de Francia, donde antes de que trajeran a Messi y hasta al mismo Neymar, venía reinando sin problemas en ella, porque en el Viejo Continente sigue siendo otro más del montón, “un rico sin oficio”.