Gabriel García Márquez no está, pero su natalicio se celebrará por siempre.
Por: Laura Rocco
“Si no volvemos a dormir, mejor -decía José Arcadio Buendía, de buen humor-. Así nos rendirá más la vida”, esta frase se lee en ‘Cien años de soledad’ el libro más icónico de Gabriel José de la Concordia García Márquez, conocido como ‘Gabo’, el gigante de la literatura colombiana y latinoamericana, que hoy, 6 de marzo, cumpliría 94 años.
En honor a esta fecha especial, Diana Acosta Miranda, secretaria de Cultura y Patrimonio del departamento del Atlántico, publicó en sus redes sociales un emotivo video en el que la cantadora Lourdes Acosta recuerda cuando bailó junto a Gabo el día en el que recibió el Nobel en Estocolmo.
“Yo soy cantadora y fui bailarina, pero la mayor experiencia mía como artista fue ese momento en el que a mí me dijeron “vas a acompañar a Gabriel García Márquez a recibir ese galardón en Estocolmo””, expresó Lourdes.
El 10 de diciembre de 1982, día en que Gabo recibió el premio, fue rodeado de las bailarinas tradicionales, junto a las cuales celebró ese logro, motivo de orgullo para él y para todo un país. Lourdes recuerda las ansias que tenía porque llegara ese instante. “Yo siempre decía, cuando nosotras nos encontremos con el Nobel, creo que me le voy a lanzar a los brazos, le voy a besar, lo voy a acariciar”.
Para ella, ese ha sido el honor más inmenso que ha tenido en su trayectoria. “Ese momento yo no quería que se borrara de mi mente, ni que pasara, sino quedarme estática con él ahí. Gabo vive en el corazón de todos los colombianos, pero creo que especialmente en la gente del Atlántico, de Barranquilla y de su municipio”, dijo la cantadora.
Fragmentos de una inmensa historia para recordar
Gabriel García Márquez nació en Aracataca, Magdalena, donde poco tiempo después de su nacimiento, fue dejado por sus padres Gabriel Eligio García y Luisa Santiaga Márquez Iguarán bajo el cuidado de sus abuelos maternos. A los 8 años tras el fallecimiento de su abuelo, se fue a vivir a Barranquilla con sus padres, donde entró a estudiar bachillerato en el Colegio San José.
No obstante, Gabo se terminó graduando de bachiller en 1946 en el Liceo Nacional de Varones, Zipaquirá. Para el año de 1947 se inscribió en el programa de Derecho en la Universidad Nacional de Colombia, y aunque no pudo culminarla, el lugar que empezó a ganarse en el periodismo, y sobretodo en las letras, fue suficiente para convertirlo en uno de los más grandes representantes del país a nivel internacional.
El 21 de Octubre de 1982 Gabriel García recibió la llamada del entonces viceministro de Asuntos Exteriores de Suecia, Pierre Schori, anunciándole que había ganado el Premio Nobel de Literatura.
Gabo recibió el 10 de diciembre su galardón en Estocolmo, vestido con un liquilique, también conocido como liqui liqui (traje), para honrar la memoria de su abuelo. Días antes de recibirlo pronunció el discurso de aceptación del premio, ‘La Soledad de América Latina’.
Vivir a García Márquez a través de sus letras
Para vivir a Gabo es necesario dejarse sumergir en los mundos literarios de sus obras, llenas tanto de las más mágicas fantasías, como de las más crudas realidades; además de tener que pasar por sus discursos, memorias, entrevistas, artículos, entre otros. De hecho, es un faro en las escuelas y universidades que enseñan periodismo, cuyos alumnos pueden obtener de su sabiduría innumerables enseñanzas.
“Es muy difícil darles consejos a los jóvenes escritores, pero si tuviera que darles uno sería este: hay que aprovechar la vocación de los primeros años para aprender todos los trucos y técnicas del oficio, hay que aprender esos trucos cuando el inconsciente es más fuerte y más apremiante, cuando no se tienen esas enormes limitaciones y responsabilidades que causa la fama”, aconsejó Gabo en la revista El Viejo Topo, en 1979.
Si se pretende valorar el talento, fruto de las tierras colombianas, su arte es una vereda inevitable por la que hay que transitar, especialmente con obras como ‘Cien años de soledad’, ‘El coronel no tiene quien le escriba’, ‘Crónica de una muerte anunciada’, ‘El amor en los tiempos del cólera’ y ‘La hojarasca’.