Durante el ataque a bala dos personas resultaron heridas, uno de los lesionados tiene orden de captura en su contra.
Momentos en que llegó “a saludar a un primo”, según dicen testigos, fue asesinado a bala Jürgen José Calvo Cantillo, de 29 años de edad, en la noche del pasado domingo 7 de abril, en el barrio Lipaya de Barranquilla, Atlántico.
El caso se registró siendo alrededor de las 9:10 p. m. a la altura de la calle 73C con carrera 13 y, producto del mismo, perpetrado por criminales a bordo de una motocicleta negra, dos ciudadanos más resultaron heridos. Así lo indicó la Policía Metropolitana de Barranquilla en su informe:
“Pierde la vida Jürgen José Calvo Cantillo y resultan lesionados Yeison González, de 27 años, y Osvaldo Sáenz, de 31 años. Estos se encontraban en el lugar departiendo, en ese momento dos sujetos a bordo de una motocicleta impactan a las víctimas con arma de fuego. Uno de los lesionados presenta tres anotaciones en sistema SPOA por los delitos de tráfico de estupefacientes, hurto y violencia intrafamiliar y, además, presenta una orden de captura vigente por el delito de hurto calificado y agravado”.
Por su parte, José Clavo Ortega, padre de la víctima, contó sobre el hecho de sangre: “Me encontraba en mi casa, él estaba a unas cuadras compartiendo con unos amigos, supuestamente, él iba pasando, un primo lo llamó, llegó a saludarlo, aparecieron dos tipos en moto, hicieron varios tiros, un tiro lo impactó a él”
Un amigo auxilió a Jürgen José y lo llevó hasta el Camino La Manga, pero ya no había nada que hacer por salvar su vida. “Un carro que estaba ahí es de un amigo al que también lo impactó un disparo en el pie, se montó en el carro y se fue iba su casa, pero se estrelló con un carro de mula que lo atravesó”.
De la víctima se conoce que trabajaba desde hace más de un año en Gases del Caribe, la motocicleta en la que se movilizaba era su propiedad y dejó dos niños. Su padre expresó: “La última vez que hablé con él fue a las 2:00 de la tarde que salió de mi casa. Él vivía en mi casa en el barrio Sourdis. Pido a las autoridades que investiguen a fondo realmente qué sucedió y nos den esa información para esclarecer los hechos. Era un pelao sano, trabajador, todo el mundo lo conoce en el barrio“.
Informe: Alexander Ojito – El Ojo de la Calle
