Además, el central samario fue de los mejores en la cancha al imponer garra, actitud y buen juego en el sistema defensivo del conjunto ‘quillero’.
Por: Iván Peña Ropaín.
Una de las figuras de la noche del jueves anterior en el repleto estadio Metropolitano de Barranquilla para Junior fue Jermein Peña, quien no solo resaltó por el temperamento que inyectó en la zona defensiva, sino por su gol que le dio vida a su equipo.
En el duelo frente al América de Cali por la fecha 5 (penúltima) del cuadrangular A de la Liga Betplay-II el backcentral samario dijo “aquí estoy” al 73′, cinco minutos después de que el Rojiblanco recibiera un mazazo tras el golazo de Josen Escobar.
Esa escena fue su gol de tiro libre desde la medialuna, que por más que diera en un hombre americano que estaba en la barrera y le desviara la pelota al meta Jorge Soto, fue fundamental para levantar la moral del conjunto ‘quillero’, que en las postrimerías se hizo al de la vital victoria 2-1 gracias a Didier Moreno.
Su diana ya era un palpito que tenía horas previas, según dijo a los medios en zona mixta al culminar el cotejo. Peña sostuvo: “Me acosté como a las 3 de la mañana pensando y decía: ‘Dios mío, dame la oportunidad de hacer un gol’. No sé, algo me decía que hoy era el gol mío. Ayer (miércoles) estaban mi hermano, mi tío y mis tres mejores amigos en el banderazo, los metí a la concentración y les dije: ‘Tengo mucha fe de que mañana voy a meter mi primer gol con Junior y lo voy a celebrar con ustedes’, y así pasó”.
