Un fiscal le imputó el delito de extorsión agravada al presunto delincuente por los hechos registrados en Barranquilla, pero este no se allanó el cargo.
Los elementos materiales probatorios aportados por la Fiscalía General de la Nación permitieron que un juez de control de garantías impusiera medida de aseguramiento en centro carcelario a Meison Ariza Orozco, por su presunta responsabilidad en realizar exigencias económicas a un comerciante en Barranquilla, Atlántico.
En ese sentido, un fiscal especializado le imputó el delito de extorsión agravada. En el desarrollo de las audiencias preliminares, Ariza Orozco no aceptó el cargo.
El ente investigador indicó: “El material de prueba da cuenta de que el pasado 27 de enero, el procesado se habría identificado como supuesto integrante de un grupo armado, para exigirle dinero a un proveedor de alimentos en el barrio Las Flores. Al parecer, le solicitó dos millones de pesos para que pudiera continuar repartiendo y abasteciendo de productos a las tiendas de ese lugar y no atentar contra su vida y la de su familia”.
El procesado fue capturado en flagrancia por el Gaula de la Policía Nacional cuando, presuntamente, recibía de manos de la víctima 200 mil pesos.
