“Labores investigativas permitieron establecer que el atentado, al parecer, se originó por un ajustes de cuentas, entre organizaciones al margen de la ley”, dijo la Fiscalía, versión que contradice la familia del occiso.
En las últimas horas fue enviado a prisión Sebastián Julio Jiménez, de 22 años, por su presunta responsabilidad en los delitos de homicidio agravado y fabricación, tráfico y porte ilegal de arma de fuego agravado debido a hechos registrados en la tarde del pasado domingo 19 de febrero, en el barrio Ciudad Jardín de Cartagena, Bolívar.
De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía, el hoy procesado junto a otro hombre habría disparado con arma de fuego causándole la muerte a José Alfredo Morelos Blanco, quien se desempeñaba como mototaxista.
Según testigos y allegados, ese domingo siendo la 1:00 p. m., el mototaxista salió de su vivienda tras almorzar y se dirigía al lugar donde solía ubicarse para empezar a trabajar. Antes de llegar hasta allí, se parqueó debajo de un árbol y posó para un amigo con el fin de que este le tomara una fotografía, la cual se encontraba subiendo a sus redes sociales cuando fue interceptado por los delincuentes.
Una vez cometido el acto sicarial, los sujetos huyeron del lugar; por fortuna, uniformados de la Policía de Cartagena que se encontraban cerca del sitio de los acontecimientos lograron, tras una persecución, capturar a dos sospechosos. Al momento de su detención, les encontraron en su poder el arma sin permiso oficial de porte con la que, supuestamente, se cometió el crimen. Sin embargo, solo uno de los presuntos asesinos ha sido enviado a prisión.
El ente investigador indicó en un comunicado: “Labores investigativas permitieron establecer que el atentado, al parecer, se originó por un ajustes de cuentas entre organizaciones al margen de la ley. Durante las audiencias concentradas, el hombre no aceptó los cargos imputados por el ente acusador y su reclusión se llevará a cabo en la cárcel San Sebastián de Ternera de Cartagena“.
Sin embargo, familiares del hoy occiso aseguran que su ser querido no era miembro de ninguna organización delincuencial y que, además, le arrebataron la vida siete días antes de su matrimonio, que habría sido el 26 de febrero con la que fue su compañera sentimental por 16 años.
