Aunque el expresidente boliviano salió ileso, el conductor que lo acompañaba resultó herido. El exmandatario culpó al Gobierno de Luis Arce del intento de asesinato.
El expresidente de Bolivia, Evo Morales, denunció un atentado que se perpetró en su contra el pasado domingo, cuando se dirigía de la localidad de Villa Tunari a Lauca para participar en su programa dominical en la emisora Kawsachun Coca.
Fueron 14 impactos de bala los que recibió la camioneta blindada en la que se transportaba junto a su conductor y otras dos personas. El exmandatario y sus acompañantes registraron el suceso a través de un video que grabaron con un teléfono celular.
En diálogo con la emisora colombiana Blu Radio, Morales explicó que fue un grupo de desconocidos armados con fusiles que viajaban en dos o tres camionetas los que dispararon contra la camioneta en la que el se movilizaba, logrando herir al conductor.
“Justo pasamos por un puesto de control, cuando noté que había un carro bloqueándonos, yo pensé que era algún transportista ebrio, pero me dio cuenta que apareció otro vehículo también cerrándonos, de inmediato dije que era un atentado, una emboscada y le dije al conductor que diera la vuelta. En ese momento nos dispararon tres veces y la compañera que iba conmigo me dijo que me agachara y la bala pasó por el lado de donde yo estaba sentado”, contó Morales.
Adicionalmente, agregó que “en el camino dispararon a la llanta” de la camioneta y siguieron haciéndolo, contabilizando 14 detonaciones en total. El exmandatario denunció la acción armada ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), señalando a agentes del estado ordenados por el actual presidente de Bolivia, Luis Arce, de ser los responsables.
“Me acusaron de terrorista y narcotraficante por haber liderado Bolivia (…) Aquí hay un problema, (con el Gobierno) tenemos diferencias de carácter programático, ideológico y ético. Después de la marcha por la patria en septiembre de este año, me abrieron nueve procesos. Intentaron matarme jurídicamente y no pudieron, quería) destrozarme jurídicamente con nueve procesos, era uno nuevo cada dos días después de la marcha. Esto viene del Gobierno para acabar con mi vida”, aseguró el exjefe de Estado de Bolivia.
Informe y redacción: Luis Ángel Terán
