El Tiburón visitará en la próxima fecha (17) a Millonarios en Bogotá, el miércoles 17 de abril, a las 6:10 p.m.
Por: Iván Peña Ropaín.
De la importante victoria que se necesitaba para estar más próximo a los octagonales, no se pudo hacer en su estadio Metropolitano Roberto Meléndez, la noche del sábado 13 de abril, Junior de Barranquilla, al igualar 1-1 con Envigado en su choque por la fecha 16 (de 19) de la Liga Betplay-I.
Para el duelo ante un molestoso envigadeño, Arturo Reyes tiró sobre el tapete del Coloso de la Ciudadela a “toda la banda” con la que empezó su participación en Copa Libertadores, exceptuando una sola modificación: el central Howell Mena por su homólogo Jermein Peña.
En el resto de la estructura estuvo Santiago Mele, Walmer Pacheco, Gabriel Fuentes y Brayan Ceballos en el sector de atrás; Didier Moreno, Víctor Cantillo, Deiber Caicedo, José Enamorado y Yimmi Chará en zona medular; y en la delantera Carlos Bacca.
Era más que necesario poner a gran parte de la pesada, aunque en esta están ausentes los centrales principales y quienes se encuentran entre algodones: Rafael Pérez y Emanuel ‘Turro’ Olivera, porque el triunfo urgía para seguir entre los ocho y aproximarse a la clasificación a los octagonales del Apertura.
En lo que fue esa primera parte, Junior arrancó algo fofo, permitiéndole al rival que iniciara manejando las acciones, teniendo dos llegadas con claras características de anotaciones. Por suerte para el dueño de casa, no la pudieron embocar.
Fueron casi 18 minutos en los que se vio a un Rojiblanco pausado y a un elenco naranja, que jugó de negro, mostrándose más en cancha, hasta pasados los 20′, cuando comenzó a generar ataque, aunque más motivados por los errores en salida del contrario.
En la dinámica que se le vio al ‘currambero’ tuvo dos embestidas en las que pudo romper el celofán, a través de un cabezazo de Didier Moreno y una bola que le sacaron a Chará sobre la raya. ¡Era el gol!
Se produjo otra ilusión de diana para los junioristas, rosando los 40 minutos, tras un penal que le cometieron al más fulgurante del cotejo, Enamorado, pero tras un análisis de casi cinco minutos de esa jugada en el VAR, el juez determinó que no había sido infracción contra el volante soledeño, tocando primero la bola en su cierre el defensor del equipo antioqueño.
El compromiso acabó sin más, viéndose rostros de preocupación en las gradas del Metro, ya que no se pudo anotar en los primeros 45 minutos ese tanto que empezara a dibujar los tres necesarios puntos.
Para la segunda parte en este compromiso por la fecha 16 de la Liga-I, un Envigado sin nada que perder en el torneo, pues está virtualmente eliminado, pero con las ganas de sumar para alejarse más de los dos puestos que mandan al descenso, arrancó con la pelota en los pies y con amenazas serias en el pórtico de Mele.
Así se fue percibiendo en el gramado del Metropolitano, donde en menos de cinco minutos, al 50 y 53, el Tiburón se salvó de ver quebrantar su red, lo que no puedo evitar tocando el 60′, en un muy buen gol de volea de Luis Díaz, tras error en la salida. ¡Sorpresa y silencio en el estadio!
Seguidamente, el equipo de Arturo-III comenzó a remar ahora, no para hacer uno con el fin de ganar, sino para empatarlo, y también para pensar en el segundo que le concediera el primordial triunfo.
En esa intencionalidad desesperada, no pasó mucho tiempo para llegar al 1-1, dándose este al 65′, luego de un testazo de Marco Pérez, quien entró en este tiempo complementario, dando la esférica en el palo y cayéndole a Bacca solo para que la empuje.
El tiempo siguiente fue un Junior de Barranquilla tratando de llegar a su segundo gol, teniendo al frente un muy buen planteamiento táctico por parte del conjunto envigadeño.
Reyes dio paso a Pérez, Luis ‘Cariaco’ González, Homer Martínez y Edwin Herrera, este último para replantear el sistema defensivo ante la injustificada expulsión de Pacheco.
Con ataques más de Junior que de su émulo, pero sin profundidad explosiva, se fue esfumando este cotejo en el que los cambios no ofrecieron muchas ideas, pudiéndose llevar los tres puntos al final, según muchos hinchas, la visita.
Tras este amargo 1-1, el equipo de los barranquilleros y costeños junioristas sumó 25 unidades y permanece en el séptimo lugar de la tabla. No saldrá de los ocho al cierre de esta fecha, pero dejará comprometida su permanencia en ese lote, al depender de victorias consecutivas en las tres jornadas que restarán para concluir el torneo regular.
