La acción de Francisco Chaverra, en la quiso burlarse de un jugador del Envigado, es el infame sinónimo del nivel en el que está el balompié profesional en Colombia.
Por: Iván Peña Ropaín.
Una jugada bastante abyecta que se dio este fin de semana en la Liga Betplay-I 2025 resumió el fatídico nivel en el que se halla sumergido nuestro fútbol profesional colombiano, ese al que algunos periodistas deportivos y hasta hinchas en el país quieren hacer ver, aunque parezca gracioso o mentira, como una “Superliga” de Sudamérica.
La vergonzosa acción de juego se dio en el choque que en el estadio Polideportivo Sur, en el municipio antioqueño de Envigado, sostuvieron el cuadro local, Envigado FC, frente al Independiente Medellín por la fecha 3 de la Liga-I.
Cursándose por el minuto 82 y ganando al final este duelo uno por cero el rojo de los medellinenses, el jugador perteneciente a este conjunto, el caleño Francisco Chaverra, tenía en posesión una pelota por una de las bandas laterales de la cancha, y ante la referencia en la marca que le hacía el volante Julián Palacios, le hizo un amague y seguidamente una jugada que solo hacen los cracks y la cual lo dejó en ridículo.
Chaverra efectuó un salto para montarse en la esférica, pero al pararse sobre ella, terminó cayéndose, produciendo la escena una pena ajena en las redes sociales, calificándose como lo peor que otro jugador rival que entró en la jugada vio la roja por darle una patada al balón, la cual casi golpea al futbolista del Medellín, mientras este último no vio la tarjeta colorada por la acción que muchos catalogaron como burla.