El partido se había suspendido, momentos en que los argentinos, en el minuto 105 de reposición, le habían igualado a dos a los marroquíes.
Por: Iván Peña Ropaín.
Un hecho nunca antes visto desde que se empezó a implementar en el fútbol el Asistente Video Arbitraje (VAR) se registró, el miércoles 24 de julio, en uno de los partidos del fútbol masculino de los Juegos Olímpicos París 2024.
El polémico cotejo lo protagonizaron por el Grupo B los seleccionados de Argentina y Marruecos, el cual se fue a los 90+15 de reposición, dándose en el cierre de ese último período la paridad a dos por parte de los argentinos, lo que desató una airada reacción de los hinchas del equipo africano que la cogieron contra los “gauchos” arrojándole botellas y petardos.
Por tal motivo, el compromiso futbolístico se vio obligado a ser suspendido mientras se retomaba la calma, quedando poquísimo tiempo para que se escuchara el pitazo final en el estadio de la ciudad de Lyon.
Resulta que la controversia se desató, momentos en que fue reanudado el cotejo, dos horas después de haberse paralizado por las agresiones e invasión de cancha que también se dio, por lo que tuvo que terminarse con el escenario vacío.
El árbitro sueco Glenn Nyberg empezó analizando en el VAR la jugada de anotación de la Albiceleste, facturada por Cristian Medina, al minuto 105, y la que al final fue sentenciada como fuera de juego. Tras anularse la diana, el referí repuso tres minutos más, en los que los sudamericanos no pudieron igualar y terminaron perdiendo 2-1.
