Según las autoridades, el joven perdió el control de la motocicleta en la que iba con su madre e impactaron contra un separador vial.
Un amanecer teñido de dolor y tragedia se vivió el pasado jueves 10 de julio en la carretera que conecta a Pueblo Nuevo con Valledupar, cuando una madre y su hijo encontraron la muerte de forma repentina tras impactar contra una baranda metálica en cercanías del puente San José de Ariguaní, jurisdicción del municipio de Bosconia.
Las víctimas fueron identificadas como Deisy del Carmen Morales, de 61 años, y su hijo Moisés Enrique Vives Morales, de 25, quienes viajaban en una motocicleta marca XR de la línea Honda, de placa XFM-91F.

Según el reporte preliminar de las autoridades de tránsito, Moisés habría perdido el control del vehículo en circunstancias aún no esclarecidas, lo que provocó que ambos salieran despedidos tras estrellarse contra el objeto fijo apostado a un lado de la vía.
El impacto fue tan violento que madre e hijo fallecieron de manera inmediata sobre el asfalto, sin que hubiera oportunidad de asistencia médica. Testigos que transitaban por el lugar fueron quienes alertaron a las autoridades, las cuales llegaron al sitio para realizar la inspección técnica de los cuerpos.

Ambos eran oriundos de Planeta Rica, Córdoba, y aunque se desconoce su destino final, su viaje terminó en medio del silencio y el dolor de quienes presenciaron la escena.
La historia de Deisy y Moisés no solo conmueve por su repentino final, sino por el lazo de amor que los unía, truncado por una tragedia que enluta a toda una comunidad. Ella, una madre de rostro sereno y voz suave; él, un joven con sueños por delante, conductor de su destino y ahora, víctima junto a la mujer que le dio la vida.
Mientras las autoridades continúan con la investigación para esclarecer las causas del accidente, amigos y familiares en Planeta Rica se preparan para darles el último adiós, en medio de una profunda consternación. Hoy, la carretera guarda el recuerdo imborrable de una madre y un hijo que partieron juntos, en un viaje que no tenía retorno.