El duelo ante Boyacá Chicó se dará en un estadio La Independencia cuyo gramado está en horribles condiciones.
Por: Iván Peña Ropaín.
Más allá de ganar para seguir ascendiendo en la tabla de posiciones de la Liga Betplay-II, el triunfo es justo y necesario para que Junior de Barranquilla permanezca dentro del lote de los ocho primeros y dependiendo de sí mismo en su aspiración a meterse en los cuadrangulares finales. A las 4:00 de la tarde de hoy miércoles, en el estadio La Independencia de Tunja chocará con el Boyacá Chicó.
Aunque para muchos junioristas será un juego asequible, por el rival que tendrá al frente y porque marcha antepenúltimo (18) en la tabla, la realidad es que el Tiburón carga una mala racha en suelo tunjano, donde no gana desde el 17 de mayo del 2015, cuando derrotó al Ajedrezado 2-0 por la fecha 20 del Torneo Apertura.
Con esa negativa estadística sabe el Rojiblanco que saltará al césped de dicho escenario, el cual hay que decir no está en las mejores condiciones para desarrollar fútbol. Y tal ausencia de triunfos allá han tenido una explicación principal, independientemente de si haya jugado mal o no sus partidos, y es la altura que se maneja en la capital de Boyacá, la cual siempre le ha pegado duro a los equipos de tierra caliente.
Entrando en materia con lo que debe hacer el cuadro dirigido por Arturo Reyes, la victoria es la única opción para seguir soñando con meterse en los octagonales finales, más todavía porque después de esta jornada 13 quedarán siete para concluir el torneo regular. De empatar, entraría a depender de resultados de equipos que están por debajo de él para no terminar noveno, décimo y hasta undécimo al cierre de esta fecha.
Ya se entra en el tramo de que si estás dentro de los ocho primeros, no puedes estar dándote el lujo de ingresar y salir de ese grupo en cada jornada, ya que corres el riesgo de que en la última fecha 20 te toque depender de resultados y quedes por fuera, tal como le pasó al cuadro barranquillero en la Liga-I 2023, cuando debía derrotar a Huila a domicilio pero estaba sujeto a que el Deportivo Pasto no derrotara en su casa al Envigado, lo que al final pasó con un autogol bastante dudoso del defensa envigadeño y el que dejó por fuera al Tiburón.
