El ente que rige el balompié aficionado atlanticense señaló que el objetivo o único fin es disciplinar al infractor, más no irrogarle o infringirle un daño igual o superior a la falta que cometió.
Por: Iván Peña Ropaín.
Total rechazo y enfado hay en la comunidad futbolera del entorno de la Liga de Fútbol del Atlántico, una vez se conoció a la opinión pública que la Comisión Disciplinaria de ese ente deportivo local redujo de 5 años a tan solo seis meses, la sanción en contra de los futbolistas que agredieron a un árbitro en medio de un partido dado el pasado 13 de diciembre en el Polideportivo de la Universidad Autónoma de Caribe, en el municipio de Puerto Colombia.
La víctima, tanto por parte de padres de familia como de varios jugadores de la categoría 2009 Premium de la escuela de fútbol Evolution Soccer, fue el árbitro central cucuteño Brandon Alandete, quien terminó con varios días de incapacidad por los golpes y patadas que sufrió.
La disminución de la penalidad impuesta quedó contemplada en la resolución 0001 de 2024 de dicha comisión de la Liga de Fútbol del Atlántico, luego de que la parte agresora apelara la decisión inicial y quedando todo en seis meses, de los cuales ya se van a cumplir dos (enero y febrero).
Sobre esta polémica reducción en la sentencia, lo que muchos catalogan como un mal mensaje en materia de ética deportiva, la Comisión Disciplinaria de la Liga se defendió indicando: “El objetivo o único fin de disciplinar al infractor no es el de irrogarle o infringirle un daño igual o superior a la falta que se hubiese podido cometer, o hacerlos ver como culpables de algo irreparable, y muy por el contrario se debe hacerles ver y entender que nuestra sociedad se rige por una serie de normas, códigos y preceptos que se deben observar y que son de obligatorio cumplimiento”.
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Lo que se mantuvo firme en la resolución fue “sancionar pecuniariamente con un salario y medio mínimo legal vigente del año 2023 a los padres de familia de los menores involucrados en los presentes hechos”. Asimismo, los padres también deben realizar trabajo social obligatorio, sin opción de alguna especie de apelación.
El día de la fuerte agresión al referí
En el cotejo que adelantaban las categorías 2009 de las escuadras Evolution Soccer y Club Fusión Caribe, se disputaban las semifinales del torneo de la Liga atlanticense de fútbol.
Según se supo, iba el compromiso 2-1 a favor de Evolution, pero faltando poco para escucharse el silbato final del cucuteño Alandete, este decretó una pena máxima para el rival, lo que emparejó el juego 2-2 y llevaba la definición a los penales.
Los reclamos airados de los padres de familia que estaban en las tribunas no se hicieron esperar, alegando que no era penal. Cuando los protestantes ingresaron al terreno de juego para dirigirse a quien operaba como juez central, Alandete, empezaron a acorralarlo y, entre palabras y conatos de empujones que iban y venían, se desató al final la agresión viralizada en redes sociales, en la que también participaron varios de los futbolistas menores de edad, quienes le propinaron fuertes patadas.
Por los golpes recibidos por la turba, la víctima de la agresión no pudo laborar en los siguientes días, por lo que recibió asesoría jurídica de la Universidad del Atlántico para orientarlo sobre cómo debía proceder en estos casos para las respectivas denuncias por la agresión física de la que fue objeto.
