Los junioristas amanecieron con guayabo moral por la penosa eliminación en Sudamericana.
Por: Iván Peña Ropaín.
Apaleado, despechado, sin ánimos y con un ‘guayabo’ futbolístico anda este viernes 27 de mayo la ciudad de Barranquilla y la hinchada juniorista, a raíz de la horrísona noche del jueves 26 de mayo, en la que Atlético Junior fue humillado, goleado y despechado de la Copa Sudamericana, y en su propia casa, por Unión de Santa Fe, club que está entre los pequeños del fútbol argentino.
Pero, sin lugar a dudas, el más dolido de todos sería el exsenador y máximo accionista del Tiburón, Fuad Char, quien de seguro despertó con una resaca de esas que deja los cuatro días de Carnaval, no solo por la pesadilla vivida anoche, sino por la millonaria inversión económica que ha hecho en los últimos años por conseguir una distinción internacional, y más con la del actual plantel, y sin embargo las ganancias deportivas han sido ínfimas.
No es para menos la conjunción de pesadumbre, melancolía y rabia entre los barranquilleros: fueron cuatro las veces que vieron vulnerar el arco de Mario Sebastián Viera por un rival cuya nómina no supera los 500 millones de pesos, la que se pagaría con lo que devengan tan solo dos jugadores del cuadro Rojiblanco.
Pero esta hecatombe producida por la dolorosa derrota en el Metropolitano no solo provocó el amargo despertar este viernes de muchos en Curramba la Bella, también debe tener cavilando al equipo de mercadeo de Junior.
Y es que ahora se encuentra en riesgo el esfuerzo que hicieron en los últimos días por seducir y convencer a la afición juniorista para que asista masivamente al coloso de la Ciudadela y para que se abone, ideando para tal fin una nueva estrategia que captó la atención de muchos, la cual consiste en que si compras un abono y antes del 15 de julio de 2022 el club llega a los 20 mil abonados, a ese comprador le regalan otro abono.
Sin embargo, como consecuencia de la vergonzosa y horrible presentación que hicieron los jugadores del Tiburón, por como salieron muchos hinchas del estadio y por como amanecieron otros más, tal promoción estaría hoy en veremos, tal como se comenta en las calles de la ciudad.
Ahora, para mejorar el ánimo y recuperar la fe de su hinchada, y hasta para volver a motivar para que se logre llegar a la meta de los 20 mil abonados, los mismos responsables del desastre en Sudamericana serán los que tendrán que rescatar todo lo perdido, principalmente, con su actuación en los cuadrangulares finales de la Liga colombiana.
