Las férreas penalidades por la guerra desatada con Ucrania ha repercutido en otros deportes.
Por: Iván Peña Ropaín.
Ante las severas medidas tomadas recientemente por la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) y la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (UEFA) contra el fútbol ruso a nivel de Selección y clubes, la Federación Rusa de Fútbol (FRF) la tarde de este martes 1° de marzo dejó de guardar silencio y alzó su voz de rechazo por las consecuencias que les ha tocado pagar por culpa de la absurda invasión a Ucrania del gobierno de Vladimir Putin.
“Expresamos nuestro categórico rechazo a tales medidas. Creemos que estas decisiones son contrarias a las normas y principios de la competición, así como del espíritu deportivo”, redactó la FRF en el documento en el que manifestó su perorata.

Continuó su réplica: “Las medidas tienen un carácter claramente discriminatorio y perjudica a un gran número de deportistas, entrenadores, trabajadores de clubes y selecciones nacionales y, lo que es más importante, a millones de aficionados rusos y extranjeros, cuyos intereses deben proteger las organizaciones deportivas internacionales”.
Y remarcó: “Dichas acciones están dividiendo a la comunidad deportiva mundial, que siempre se ha adherido a los principios de igualdad, respeto mutuo e independencia de la política. Nos reservamos el derecho de impugnar la decisión de la FIFA y la UEFA de conformidad con el derecho deportivo internacional”.

Es de recordar que entre los duros castigos de la FIFA y la UEFA contra el fútbol ruso sobresalen el inhibir a su Selección a que continúe su participación en la zona de repechaje de cara al Mundial de Catar, en la que en pocos días debía enfrentar en Moscú a su similar de Polonia, la cual en protesta se había opuesto a jugar ese cotejo.
En el mismo sentido, la UEFA había eliminado al club ruso Spartak de Moscú de la fase de octavos de final de la Europa League, donde iba a enfrentar su partido de ida ante el alemán Leipzig.