En las últimas horas, Coca-Cola Femsa se pronunció asegurando que las cámaras en torno a las cuales gira la polémica están ubicadas en la zona de “lockers”, la cual “no es habilitada para cambio de vestuario”.
El Bloque Feminista y el Movimiento Amplio Social de Mujeres y Diversidades emitieron un comunicado rechazando enfáticamente los hechos denunciados por empleados en las instalaciones de la empresa Coca-Cola en Barranquilla, el pasado 28 de agosto.
“Expresamos nuestro total respaldo a las mujeres cuyos derechos a la intimidad y a un trabajo digno han sido vulnerados. Exigimos a las entidades institucionales y estatales que abran una investigación para esclarecer estos aberrantes hechos”, dice el documento sobre la denuncia en la que indicaban que habían instalado cámaras, supuestamente, en los baños de las mujeres y los hombres.
El colectivo hizo énfasis en la medida violatoria, citando a la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (entrada en vigor en Colombia en 1981) y al artículo 1, en el cual se establece:
“Discriminación contra la mujer denotará toda distinción, exclusión o restricción basada en el sexo que tenga por objeto o resultado menoscabar o anular el reconocimiento, goce o ejercicio por la mujer, independientemente de su estado civil, sobre la base de la igualdad del hombre y la mujer, de los derechos humanos y las libertades fundamentales en las esferas política, económica, social, cultural y civil o en cualquier otra esfera”.
También, enfatizaron: “La Declaración de la OIT relativa a los principios y derechos fundamentales en el trabajo (1998) señala: los cinco principios y derechos fundamentales en el trabajo, libertad de asociación y libertad sindical, la eliminación del trabajo forzoso u obligatorio, la eliminación efectiva del trabajo infantil, la eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación y un entorno de trabajo seguro y saludable”.
Por su parte, Coca-Cola Femsa emitió en las últimas horas un comunicado sobre la situación, asegurando que la empresa es respetuosa de la ley, los derechos de los colaboradores y el derecho a la intimidad y la privacidad.
“Coca-Cola FEMSA cuenta con un espacio en el que se encuentran los lockers, casilleros individuales dispuestos para que cada colaborador guarde sus pertenencias y objetos personales conforme a los buenos hábitos de manufactura. A su vez, la compañía cuenta con baños en los cuales los colaboradores pueden cambiarse con total privacidad. El espacio donde se encuentran los lockers no es un área habilitada para el cambio de vestuario, sino para el resguardo de objetos (…). Atendiendo a las sensibilidades expuestas, las cámaras que se encontraban en este espacio han sido removidas“.