A quien militara en equipos como Atlético Nacional y Medellín, le dictaron casa por cárcel mientras se prepara el juicio en su contra.
Por: Iván Peña Ropaín.
Se conoció en las últimas horas la noticia de que el exfutbolista medellinense Diego León Osorio, de 52 años, había sido capturado el pasado 9 de abril en el Aeropuerto José María Córdova de Rionegro, Antioquia, por llevar consigo 1.849 gramos (casi 2 kilos) de cocaína, cuando se disponía a tomar desde dicha terminal áerea un vuelo internacional hacia España.
La detención de quien jugara en clubes en Colombia como Atlético Nacional e Independiente Medellín se produjo momentos en que los uniformados se percataron que los tenis que transportaba tenían un peso superior al estipulado para su referencia, optándose por una requisa minuciosa, verificando cada uno de los calzados deportivos y descubriéndose los estupefacientes.
El proceso fue el siguiente, de acuerdo a la explicación de las autoridades policiales en Medellín: “Al sacar una de las plantillas, vieron que tenían una apariencia poco común, por lo que determinaron hacerle los análisis correspondientes y encontramos unas plantillas anormales, las cuales tienen humedad, viscosidad y un olor característico de sustancia narcótica”.
Se supo también que una vez fue presentado ante un juez de control de garantías, quien también vistiera la casaca de la Selección Colombia de Fútbol recibió la medida de detención domiciliaria acusado del delito de tráfico de estupefacientes, del cual es reincidente y ya había sido capturado en 2002 en Miami, Estados Unidos, y en 2016 en el aeropuerto que despacha vuelos internacionales en Medellín; en ambos casos intentó transportar droga camuflada en su ropa interior, recibiendo una condena por el proceso judicial de 2016 de cinco años de cárcel.
Osorio, quien “colgó los guayos” en 1998, tuvo su punto más álgido en su carrera futbolística con el verde de Antioquia, logrando dos títulos del campeonato colombiano (1991 y 1994) y siendo subcampeón de la Copa Libertadores en 1995, título alzado por Gremio de Brasil.