“Lastimosamente, no han visto con buenos ojos la labor que yo he hecho aquí en la ciudad de Santa Marta”, indicó el uniformado, quien también es creador de contenido.
El policía Ricardo Andrade, uniformado de la Policía Nacional conocido en redes sociales como el Policía Samario, denunció públicamente en las últimas horas estar siendo víctima de persecución y acoso laboral por parte de dos miembros de la institución.
El hombre se hizo popular por sus videos haciendo llamados educativos, invitando a la concientización sobre varios temas como las normas de tránsito.
“No quería hacerlo público, pero ya veo otra alternativa, esto no solamente me ha afectado mí, ha afectado a mi mamá, a mi esposa, a mi hermana. Desde el año pasado estoy sufriendo de persecución y acoso laboral en la Policía, esta institución, lastimosamente, no ha visto con buenos ojos la labor que yo he hecho aquí en la ciudad de Santa Marta, desde que llegué me dediqué a cuidar a los ciudadanos, a educarlos, concientizarlos, culturizar a la ciudad y hacer un trabajo esencial para que las personas vean la cara bonita de la Policía, pero el problema no estaba afuera, estaba adentro, no lo vieron con buenos ojos y empezaron a darme instrucciones diciéndome que yo no podía atender requerimientos de Policía, atender al ciudadano, que si había un accidente yo no podía atenderlo, que yo no tenía funciones para eso, desconociendo que cuando entré a la institución juré proteger vida, bienes y honra, es algo que me gusta”, contó.
Andrade aseguró que con el tiempo la situación se ha vuelto más angustiante: “Con toda esta persecución me abrieron una investigación disciplinaria, a raíz de un video que hice yo con todo el amor del mundo con mi vecino, un menor de edad, concientizando a las mamás, a los papás de que cuidaran a sus hijos; estaba yo descansando, de civil, saqué el tiempo para poder cumplirle el sueño a ese niño que se me acercó y me dijo: ‘Samario, quiero que hagamos un video para que a los niños en todo el mundo no les pase nada malo, que los papás aprendan que los hijos no se dejan solos’ y yo hice el video con él, a raíz de eso me abrieron una investigación disciplinaria manifestando como si y hubiera secuestrado al menor y me lo hubiera llevado a la fuerza, aun sabiendo la persona que pasó ese informe, un suboficial apoyado por un oficial, que es un informe que no tiene soporte ni nada. Tengo las pruebas y está todo sustentado donde él sabe ese día que ese video fue actuado”.
El Policía Samario aseguró que ha sido trasladado tres veces en menos de seis meses producto de la persecución y el acoso laboral: “A raíz de esto me abrieron la investigación, me desvincularon de la especialidad a la que pertenecía, Comunicación Estratégica, me inestabilizaron laboralmente, emocionalmente, y no solamente con eso, de Bogotá me trasladaron para Santa Marta y de Santa Marta para Ciénaga y de Ciénaga ahora me trasladan para San Andrés. Me tocó agotar las instancias con la Fiscalía y a Procuraduría, denuncié a estas personas y eso ha sido peor, y no solamente eso, sino que están desconociendo un traslado especial que la Policía me otorgó a finales de 2021 que yo me encontraba trabajando en Norte de Santander y me mandaron a Santa Marta para estar con mi mamá, su situación de salud ha mejorado porque yo he estado presente. No entiendo cómo la institución me otorga un traslado especial para estar con mi familia y ahora me lo quita“.
Por su parte, la madre del denunciante, quien aparece en varios de los videos publicados por él en redes, expresó entre lágrimas: “Si me toca salir con una bocina aquí en Santa Marta, lo hago (…). Mi hijo es un muchacho que no le hace daño a nadie. Algo que le llegue a pasar a mi hijo le echo a culpa a este problema que esta sucediendo porque el es un gran muchacho que quiere ayudar a la gente y a educar, ¿cómo me lo van a perjudicar de esa manera?, y algo que le pase a mi hijo le echo la culpa a esas dos personas que me quieren destruir a mi hijo. Lo quieren sacar por ser un buen policía, por no ser un policía torcido“.
Hasta el momento la Policía de Santa Marta no se ha pronunciado sobre el tema.
