El Invima advirtió que estos lugares deben cumplir con unos requisitos mínimos para ser habilitados.
A raíz del anuncio que hizo el Ministerio de Salud sobre un decreto nacional que le dará apertura a diferentes mataderos municipales, cuyo fin es que los pequeños y grandes ganaderos puedan volver a comercializar sus productos y acabar, así, con los monopolios de los frigoríficos, que han elevado el precio interno de la carne, el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), ha sostenido que estos lugares deben cumplir con ciertos requisitos para avalar su operación.
Respecto a la habilitación de las plantas o mataderos, señalaron que estas se llevarán a cabo solo si se demuestra que existen condiciones de sanidad animal, hay una dificultad en la conectividad terrestre con municipios que cuentan con instalaciones autorizadas y problemas en el suministro desde plantas de beneficio animal previamente aprobadas por el instituto.
“Las instalaciones públicas que deseen obtener la autorización sanitaria y registro, deben estar previamente incluidas en los Planes de Racionalización de plantas de beneficio delineados por los departamentos, también es esencial que mantengan condiciones sanitarias rigurosas para asegurar la seguridad alimentaria en relación con la carne y los productos cárnicos”, enfatizó el Invima.
Así, si logran cumplir con estos requerimientos que exige el Invima, entrarían a acompañar en funcionamiento a los seis que en la actualidad prestan servicio, otros 14 centros para el sacrificio de ganado y comercialización de cárnicos en el departamento del Atlántico, los cuales estarían ubicados en Baranoa, Luruaco, Palmar de Varela, Manatí, Polonuevo, Piojó, Ponedera, Repelón, Sabanagrande, Santa Lucía, Santo Tomás, Tubará y Usiacurí.
Cabe mencionar que los seis mataderos que operan bajo las condiciones establecidas actualmente dentro de este territorio, se encuentran localizados en Galapa, Malambo (2), Sabanalarga, Soledad y Suan.
Por último, desde la Gobernación del Atlántico, expusieron que este proceso debe generar un trabajo articulado entre las autoridades sanitarias y las alcaldías municipales, con el fin de cumplir con los lineamientos que exige el Invima y el decreto que expedirá el Ministerio de Salud Nacional.
Por: Luis Ángel Terán