El cobro de la medida de salud pública aplica para bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados.
A partir de este primero (1º) de noviembre entró en vigencia el impuesto a una serie de bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados, con el cual el Gobierno Nacional busca imponer una medida de salud pública a los colombianos para que consuman en menor medida este tipo de productos.
A raíz de eso, y de las críticas que le han llovido al Gobierno, en las últimas horas el presidente de la República, Gustavo Petro, ha salido en defensa de la medida tributaria, manifestándose a través de su cuenta de X.
“Esto no es para recoger dinero suyo, esto es para que usted escoja alimentos saludables y mejore el estado de salud del pueblo colombiano”, expresó el jefe de Estado.
De acuerdo con la nueva reglamentación, el gravamen para las bebidas azucaradas y los alimentos ultraprocesados será gradual. El Gobierno Nacional al ha indicado que durante lo que resta de este año recibirán un aumento del 10%, luego un 15% en 2024, hasta llegar al 20% en 2025. No obstante,, en el caso de las bebidas azucaradas la medida aplicará de forma diferencial y el impuesto se ajustará desde los 18 pesos según la concentración de azúcar por cada 100 mililitros que tenga la misma.
Por su parte, desde la Federación Nacional de Comerciantes, Fenalco, han alertado que estos nuevos impuestos gravarán una tercera parte de los ingresos totales de las tiendas, lo que a su vez, pondría en aprietos a sus propietarios y podría generar serios problemas económicos y de inflación.
Cabe acotar que la llamada “ley de comida chatarra” colombiana, impulsada por colectivos de la sociedad civil, hace parte de la reforma tributaria que preciso efectuar el presidente Gustavo Petro dentro de sus propuestas de gobierno cuando figuraba como candidato.
