¿Por qué él tomó esa opción si con mis hijas se portaba muy bien?, se pregunta la progenitora.
Erika Patricia Rubio aún no comprende la razón por la que Tilson Cantillo Morales, su expareja, quemó su vivienda, y mucho menos entiende qué debió haber dentro su mente y de su corazón para hacerlo a sabiendas de que allí estaba Cecilia Patricia, de tan solo 13 años.
“La niña se encontraba dentro de mi casa, durmiendo en mi cuarto y mi expareja se metió por el patio de la vecina, llegó dentro de mi casa, tuvo unas palabras con mi hija preguntándole dónde estaba yo y mi hija le dijo que yo estaba haciendo unas diligencias”, narró Erika, basada en lo que le dijo la menor antes de que la ingresaran a UCI.
El día de los hechos fue el 23 de enero del presente año y nadie pensó que en ese hogar, ubicado en el sector El Progreso, del barrio Olaya Herrera, en Cartagena, se viviría un hecho tan atroz.
La niña, que estaba en el cuarto de su madre, le dijo al hombre de 33 años que estaba borracho y que se fuera para la cama, aunque sabía que no lo haría, porque no era su costumbre.
“A los 20 minutos ella comenzó a respirar humo, notó que la casa estaba llena de humo, ella salió corriendo hacia la sala y ya estaba en llamas, se devolvió otra vez para el cuarto, cuando llegó al cuarto se arropó y se metió debajo de un multimueble que tenía yo en mi casa, ella escuchó una voz que le dijo ‘Celia sal que tú puedes’, me dijo que esa voz era de su primo, ella salió corriendo y se le estalló el televisor, ella se vio toda quemada“, contó la mujer invadida por una desolación y un dolor desgarrador.
Aunque inicialmente Celia fue llevada a un centro asistencial en Cartagena, después fue trasladada hasta la Clínica Reina Catalina en Barranquilla, donde este 4 de febrero se registró su deceso, siendo las 12:30 a. m.
“En el momento que yo hablé con ella en el hospital La Casa del Niño, en Urgencias, antes que la pasaran para UCI, me dijo que ella fue valiente para salir de ahí”, agregó la mamá de la pequeña.
Erika tiene siete hijos. Su relación con el sujeto había terminado ese mismo mes de enero, luego de convivir un año y seis meses. Aún se pregunta el porqué de la decisión del hombre en el cual había confiado tanto.
“Eso es lo que todavía no me cabe en la cabeza, porqué él tomó esa opción, si él con mis hijas se portaba muy bien, demasiado bien (…). Decidimos no vivir más porque teníamos muchas discusiones por el trabajo que él tenía en el mercado de Bazurto, en Cartagena de cotero”, dijo la mujer.
De Tilson se conoce que ya tenía antecedentes por violencia intrafamiliar. Ese día, al parecer, estaba bajo los efectos del alcohol. Él mismo luego de cometer el hecho salió vociferándolo y le contó a vecinos y familiares de Erika que le había quemado la casa “para que sea seria”.
Tras estos hechos la comunidad intentó lincharlo, pero llegó la Policía, lo capturó y se lo llevó. En una audiencia le imputaron los delitos de tentativa de homicidio, violencia intrafamiliar, incendio y daño en bien ajeno. Ahora se encuentra bajo la medida de detención preventiva en establecimiento carcelario.
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Informe: Alexander Ojito – El Ojo de la Calle
