¿Traspasó o no el balón la línea de gol? Es la controversia del día en redes sociales.
Por: Iván Peña Ropaín.
Tremenda polémica, con tinte de “robo”, dejó el final del partido que sostuvieron la noche del jueves 24 de marzo Uruguay y Perú, en el estadio Centenario de Montevideo, por la fecha 17 de las Eliminatorias Sudamericanas.
Ese juego disputado en territorio “charrúa” era uno de los tres relevantes de la jornada con miras a ir definiendo el cuarto puesto clasificatorio al Mundial de Catar y el quinto que otorga el pase a la repesca mundialista, en la que el seleccionado que por Sudamérica acceda deberá “pelear” en un partido único, fechado para el mes de junio, contra Australia o Emiratos Árabes.

Pues bien, transcurría entre la normalidad dicha jornada, la penúltima de las consideradas más difíciles Eliminatorias del mundo: Brasil goleaba 4-0 a Chile y lo bailaba a placer en el emblemático Maracaná, Colombia en Barranquilla hacía lo propio contra Bolivia y en la capital uruguaya la Celeste vencía 1-0 a Perú.
Acabó el cotejo en Brasil, tal como estaba dibujado sucedería; mientras tanto, en el Metropolitano Roberto Meléndez jugadores, cuerpo técnico e hinchas festejaban su importante triunfo ante los del Altiplano, pero en el Centenario, donde se seguía jugando a raíz de un inexplicable atraso dado en el inició del partido, los jugadores peruanos reclamaban una jugada en la que la bola habría ingresado en su totalidad en el arco defendido por Sergio Rochet.
¿Traspasó o no la pelota la línea?
Cursaban los segundos finales para concluir el apretado compromiso que ya tenía en su bolsillo el conjunto “charrúa”, gracias al único gol del duelo al 42’ por intermedio de Giorgian de Arrascaeta.
El volante peruano Miguel Trauco, en vista de que era la última acción que decretaría el pitazo final del brasileño Anderson Daronco, decidió lanzar un centro al área rival y este se fue cerrando hasta tomar trayectoria hacia la portería.
El portero de Uruguay, al verse sorprendido, retrocede unos pasos para hacerse con la esférica, lo que logra, pero en el retroceso se encamina hacia el interior de su portería y, a pesar de que estiró los brazos lo más que pudo, en varias imágenes se observa la esférica superando la línea de meta, lo que fue reclamado airadamente por los jugadores peruanos.
La polémica se agudizó, luego de que el VAR, tras analizar por varios minutos la controversial jugada, validara la decisión arbitral en este crucial choque entre ambos equipos. El DT Ricardo Gareca, cuando salía de la cancha con rumbo al vestuario, solo manifestaba que en el Centenario se había ejecutado “un vil robo”.

Y es que este duelo de interés también para la Tricolor y la Roja empezó con situaciones anómalas, cuando sin ninguna explicación escuchada hasta ahora, inició siete minutos después de arrancar Colombia vs. Bolivia y Brasil vs. Chile, aun sabiéndose que por orden de Conmebol, en especial para estos tres partidos, debía iniciarse todo al mismo tiempo.
Además de haber beneficiado tal paridad a peruanos, colombianos y chilenos, con el 1-1 se hubiese llegado a la última jornada de Eliminatorias con dos opciones para pisar Catar: una la del cuarto puesto en la tabla que da tiquete directo y que con su polémico triunfo Uruguay ya aseguró, y la del repechaje, que ahora es la única y por la que combatirán Colombia, Perú y Chile.
Este tipo de irregularidades casi siempre suceden en los últimos partidos de Eliminatorias Sudamericanas, no nos olvidemos de aquel juego raro en el que, aparentemente, Argentina y Uruguay se confabularon para sacar a Colombia del Mundial de Corea y Japón 2002, lo que sucedió al final logrando clasificarse la Celeste como quinta.
O el supuesto ‘Pacto de Lima’ entre Colombia y Perú, en el último partido de Eliminatorias con miras al Mundial de Rusia 2018, en el que al parecer y por las imágenes que se vieron en la TV, jugadores de ambos seleccionados hablaron entre sí dentro del terreno de juego para terminar el partido en igualdad, lo que al final sucedió clasificando a Colombia como cuarta, a Perú obteniendo el repechaje y a Chile siendo en esta ocasión la supuesta “víctima”.