El helicóptero en el que el uniformado barranquillero iba con más de una docena de compañeros fue derribado por un dron cargado con explosivos. El frente 36 de las disidencias de alias Calarcá sería el responsable.
Colombia está de luto: el pasado jueves 21 de agosto, un helicóptero de la Policía Nacional fue atacado con un dron que lo hizo precipitarse a tierra con varios uniformados a bordo, en zona rural del municipio de Amalfi, Antioquia.
A causa de este episodio, la ciudad de Barranquilla también está vestida de luto y el barrio Evaristo Sourdis lleno de dolor y tristeza, pues dentro de las 12 víctimas mortales que dejó el derribamiento de la aeronave se encuentra el patrullero José Daniel Valera Narváez, quien era natural de este sector.
IMPACTO NEWS se dirigió hacia el mencionado barrio para hablar en exclusiva con Henry Valera Castro, padre del patrullero Valera Narváez, quien contó aspectos íntimos de la vida del uniformado y de los momentos previos al lamentable suceso.
Como un joven alegre y atento con su familia, así recuerda Henry Valera el hombre a su hijo, mencionando además que este como que presentía lo que iba a pasar, pues hace poco estaba en Barranquilla y le manifestó que no quería devolverse para su lugar de trabajo.
“Él ahora último no se quería ir, como que presentía algo. Lo llamaron y como a las 10 de la noche fue que se fue corriendo, el primo que hace carreras lo llevó al aeropuerto y se fue, de ahí no lo vi más, aunque todos los días hablaba con él y me decía que estaba bien”, inició narrando el progenitor.
Seguidamente, contó que el patrullero José Daniel tenía previsto regresar a Barranquilla pronto, detallando que la última vez que se comunicó con él fue el miércoles 20 de agosto y ayer (jueves) se enteró de la trágica noticia en horas de la tarde.

José Valera terminó la secundaria en 2018 en la IED José Raimundo Sojo, ubicada en el barrio Lipaya; posteriormente prestó el servicio militar como auxiliar de Policía y como siempre soñó con servir a la ciudadanía vestido con el uniforme verde oliva, decidió continuar su proceso formativo y culminó en 2021 su carrera como patrullero de Policía.
“Yo recuerdo a mi hijo como un pelao alegre, popular con todo el mundo, muy familiar, buena persona, no peleaba con nadie, le gustaba su cervecita, pero era normal, el andaba metido en el monte y cuando venía quería divertirse. Me ha dado duro como me mataron a mi pelao“, añadió el padre en su nostálgico relato.

Como sus sueños nunca tenían un límite, Valera Narváez hizo curso de especialización en la unidad Antinarcóticos de la Policía Nacional y se encontraba desarrollando actividades de erradicación de cultivos ilícitos en la zona donde ocurrió el ataque criminal en el que fue derribado el helicóptero en el que él y más de 16 uniformados se desplazaban por el área rural de Amalfi.
“A él y a sus compañeros el helicóptero todos los días los sacaba y los ingresaba a esa zona a erradicar cultivos de coca, hasta que ayer ocurrió lo inimaginable”, dijo Henry, quien además mencionó que cada vez que ve la foto de su hijo José Daniel no puede contener las lágrimas.
“Él era uno de mis orgullos, uno de mis tres hijos varones, no tuve hembras. La mamá de él está en Bogotá y viene mañana (sábado) para el sepelio. El cuerpo de José Daniel llega esta noche o mañana”, puntualizó el padre del uniformado barranquillero fallecido.

No obstante, antes de terminar, Henry Valera no pudo ocultar la amargura que siente y envió unas palabras al presidente Gustavo Petro: “Yo le digo que componga al país porque todo lo que está pasando es culpa de él. Así como vamos Colombia se va a acabar, hay mucha guerra, muchos atentados y él muy tranquilo, pedimos que el país se componga, no aguantamos más violencia“.
Informe: Yeinner Garcés
Redacción: Luis Ángel Terán




