El tenista suizo y el español protagonizaron una pugna por décadas por ser el número uno del mundo.
Por: Iván Peña Ropaín.
El adiós del tenis de uno de los tenistas más grandes de la historia, el suizo Roger Federer, la noche del viernes 23 de septiembre, emocionó a todos en el estadio O2 de Londres, en Inglaterra, e hizo llorar hasta a su máximo rival en toda su carrera: el español Rafael Nadal.
Federer, ganador de 20 títulos de Grand Slams, considerado de los mejores de todos los tiempos en la disciplina, decidió compartir su última vez en la cancha con Nadal, el mismo al que se enfrentó en decenas de ocasiones y contra el que combatió por ser el número 1 del mundo.
Más allá de la caída en la primera jornada de la Laver Cup ante la pareja del equipo Resto del Mundo que conformaron los norteamericanos Jack Sock y Frances Tiafoe (4-6, 7-6 y 11-9), nada manchó el festejo y la emotividad que significó para todos los presentes en el escenario tenístico ver por última vez a la raqueta suiza, la que tiene el récord de mayor cantidad de semanas como el mejor del circuito (237).
Una de las escenas de mayor éxtasis se produjo en el preciso momento en que terminó el partido. Pero para sorpresa de muchos, esta tuvo como protagonista al ibérico Nadal, quien no pudo contener el llanto. Sentado junto al suizo en la silla fue captado por la transmisión televisiva con quien, a pesar de la histórica y fuerte rivalidad, consideró siempre su amigo. Y en la misma toma, se les aprecia a ambos a pura lágrima.
“Querido Roger, amigo y rival, desearía que este día no hubiera llegado nunca. Es un día triste para mí y para todo el deporte. Ha sido un placer, pero también un honor y un privilegio compartir todos estos años contigo, viviendo momentos increíbles dentro y fuera de la cancha. Tendremos muchos más momentos para compartir juntos en el futuro, hay mucho que hacer aún, ambos lo sabemos. Por ahora, te deseo toda la felicidad con tu esposa, Mirka, tus hijos y tu familia. Disfruta lo que te espera, nos vemos en Londres”, había redactado Rafa la semana anterior, minutos después de que Roger Federer anunciara su retiro por redes sociales, manifestando que sus 41 años y su cuerpo así se lo pedían.
