“Esta fue una batalla entre el David de La Arenosa y el Goliat de Nueva York, WTCA”.
El edificio World Trade Center en Barranquilla, ubicado en la calle 76 con carrera 54, recuperó y volvió a colocar su nombre en la fachada este 2 de octubre, luego de superar un conflicto ante las instancias judiciales que perduró por tres años.
Dicho litigio se generó entre la copropiedad World Trade Center en Barranquilla, uno de los edificios más representativos de la ciudad, y la multinacional World Trade Center Association, WTCA, de Nueva York.
El centro empresarial World Trade Center de La Arenosa hizo su apertura en 1997 y aunque la franquicia no siguió llamándose de esa manera, la copropiedad sí.
“Se perdió la franquicia, pero la propiedad sigue guardando ese nombre. La batalla se dio cuando la WTCA llegó Colombia y a través de unos abogados demandó a la copropiedad del edificio en Barranquilla. Se dio una pugna en primera instancia tras la que ellos (la copropiedad de Barranquilla) ganaron el proceso”, expresó una fuente a Impacto News.
La WTCA (organización autorizada para entregar la licencia del nombre y la marca WTC) ya tiene edificios en Bogotá, Cali, Cartagena, Medellín, Ibagué y Pereira y bajo su licencia, ciudadanos norteamericanos tenían planes desde el 2016 para construir uno frente al Malecón del Río, hacia el 2023.
“La copropiedad en Barranquilla se constituyó en 1995, las acciones de reclamación tienen un termino de prescripción de 5 años y solo hasta el 2016 hicieron la reclamación ante la Superintendencia. Este edifico es un icono de la ciudad, es de los primeros y mantiene relevancia, este es un tema jurídico impresionante”, agregó la fuente.
¿Cómo el World Trade Center de Barranquilla ganó la batalla?
En primera instancia se negaron las pretensiones de la WTCA por prescripción de su acción, su abogado interpuso recurso de apelación, pero en segunda instancia, la Sala Civil del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Bogotá confirmó la sentencia dada en primera instancia.
Inconforme con la decisión tomada, el abogado de la WTCA presentó una demanda de casación ante la Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Civil, la cual inadmitió la demanda.
Cuando la copropiedad en Barranquilla obtuvo la sentencia favorable en primera instancia, volvieron a colocarle el nombre; sin embargo, la Superintendencia de Industria y Comercio los multó por más de $11 millones, dado que la WTCA había solicitado como medida cautelar al inicio del proceso que se quitara dicho nombre.
El dinero de la multa tuvo que cancelarse, por lo que el representante de la copropiedad ha evaluado adelantar acciones en contra de la WTCA. Por otra parte, desde la empresa estadounidense se intentó llegar a un acuerdo con los implicados de Barranquilla, pero no se logró.
Los inversionistas norteamericanos que adquirieron la franquicia para Barranquilla ante la WTCA, creyendo que estos eran los únicos titulares, perdieron su inversión, luego de que se diera por victoriosa a la copropiedad de Barranquilla, dado que no era viable construir otro edificio con el mismo nombre, estando ratificado que la edificación de esta ciudad tenía derecho de conservarlo.
Finalmente, el edificio de la capital del Atlántico seguirá conservando su nombre. El experto en leyes y conocedor del tema comparó esta pelea a la copropiedad de la ciudad con David y al WTCA con Goliat, y agregó:
“El hecho importante es que una copropiedad debidamente organizada, pero provincial y modesta, pudo vencer a una multinacional de gran talla mundial como lo es World Trade Association Inc., con base en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, reservándose el nombre para uno de los edificios mas icónicos y recordados de la ciudad de Barranquilla”.
Informe: Laura Rocco