Atlético Bucaramanga venció en los penales a Santa Fe en El Campín de Bogotá y enarboló su primera estrella en 75 años de historia.
Por: Iván Peña Ropaín.
“Gracias, ‘Diosito’, gracias eternas. Mi Búcaros de mi vida es al fin campeón… somos los campeones de Colombia“. Esas palabras que salieron de lo más profundo del corazón de don Hernando Suárez, brotaron por el primer título que consigue su equipo Atlético Bucaramanga en la máxima categoría del fútbol profesional colombiano.
Tras el sufrimiento vivido en los últimos 10 minutos, cuando le remontaron 3-2 un 2-1 que poseía su Leopardo, los penales al final le dieron la tan ansiada gloria a este comerciante de 65 años que se vino a Barranquilla de su Zapatoca, Santander, hace 45 años. Recordemos que con ese 3-2 y por haber quedado 1-0 el duelo de ida en el Alfonso López a favor de su club, el global finalizó 3-3.
Don Hernando sufrió muchísimo, pero al final celebró este “parido” primer título que conquistó su amado equipo en los 75 años que tiene de haber sido fundado. “Campeones, campeones”, no dejaba de gritar en la sala de su casa, donde vivió este juego por la final de vuelta de la Liga Betplay-I, el cual se puso emocionante en los últimos minutos con enunciada remontada del Cardenal, aunque para él representó el ver en riesgo el salir campeón.
Para quien administra y es propietario del negocio Variedades Ade, situado en la segunda etapa del barrio Sinaí, en el suroriente de Barranquilla, después de aquella desilusión en la entonces Copa Mustang de 1997, cuando lloró porque América de Cali le negó ser campeón en la final vivida en esa oportunidad, la noche del sábado 15 de junio, todo fue diferente, y no solo porque esta vez sí levantó el título, sino porque también sintió todo el cariño del pueblo barranquillero, que estuvo en todo momento con el bumangués. Y es que se enfrentaba a un equipo de Bogotá y porque deseaban que el de Bucaramanga quedara campeón por vez primera.
En fin, don Hernando, felicidades porque su institución futbolera le cumplió en vida el que lo viera “izar” un trofeo en la primera A de Colombia.