La decisión fue adoptada por el INPEC “sin justificación alguna”, señaló el ahora exfuncionario.
Hace más de una semana, Dannys José Rodríguez Camargo, quien se desempeñaba como director de la Penitenciaría El Bosque, en Barranquilla, denunció que venía recibiendo amenazas de muerte por parte de actores delincuenciales que pertenecerían al Clan del Golfo, quienes le advertían que le daban 24 horas para dejar su cargo.
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Firme en su convicción, el funcionario decidió elevar la denuncia penal y solicitar medidas de protección sin apartarse de su cargo. Sin embargo, una decisión de última hora proferida por el INPEC lo tomó por sorpresa.
En las últimas horas, el instituto carcelario del país declaró insubsistente su nombramiento y decidió retirarlo de su cargo como director de la penitenciaría. Frente a esta determinación, Dannys Rodríguez manifestó en diálogo con algunos medios nacionales que lo tomó por sorpresa, pues no lo esperaba ni había justificación alguna para hacerlo.
“El motivo, bueno, no hay ningún motivo. Es simplemente el poder discrecional que tiene el director del INPEC por ser un cargo de libre nombramiento y remoción”, dijo en Caracol Radio.
El INPEC especificó que la decisión se toma en ejercicio de la facultad discrecional de la institución y que contra la presente no habrá apelación o recurso administrativo.
Rodríguez Camargo cuestionó esta disposición y manifestó sentirse abandonado por parte del Estado y de quien fuera por dos años su casa de trabajo. “Se supondría que, en este Estado, como servidor público, y al haber denunciado una amenaza, debería tener respaldo”, aseveró.
“Como funcionario público me tocó hacer la respectiva denuncia ante la fuerza pública y la Fiscalía, también notifiqué la situación tanto al nivel central como regional del INPEC. Me he quedado solo en esta lucha, no he tenido el respaldo suficiente. Hace una semana envié el correo con toda la trazabilidad para elevar la petición hasta la UNP (Unidad Nacional de Protección) y hasta el día de hoy no he recibido llamadas. Estoy totalmente a merced de la delincuencia, más desprotegido que nunca”, expresó en Blu Radio.
Aunque reconoció que el que lo apartaran de su cargo puede resultar beneficioso en cierta medida, indicó que tanto él como su familia continúan con el temor de la amenazas y solicitó que su inquietud sea atendida y se le brinden las garantías de seguridad que requiere.
“Sentimos bastante nerviosismo. No sabemos cómo manejar esta situación, le toca a uno protegerse. En ese momento me acompañaban algunos funcionarios del INPEC en los desplazamientos, pero no había un esquema de seguridad, tampoco una garantía por parte del Estado, ni de la fuerza pública o de la UNP”, finalizó el ahora exdirector de la Penitenciaría El Bosque.