“La intervención del Gobierno a Air-e será una solución solo si cuenta con recursos y se ejecuta con responsabilidad y transparencia”, apuntó el gobernador del Atlántico.
Continúa la discusión en torno a la crisis del sector energético en la región Caribe, un día después de que Air-e reportara problemas financieros y el Gobierno nacional accediera a su solicitud de intervención para garantizar la presentación del servicio de energía eléctrica en Atlántico, Magdalena y La Guajira, departamentos donde opera la empresa.
En esa línea, este miércoles 11 de septiembre, el superintendente de Servicios Públicos, Dagoberto Quiroga, se refirió a la situación y dijo que esto obedece a una combinación de factores, entre ellos, las dificultades financieras de las empresas.
“Esto revive un poco la crisis que llevó a la intervención de Electricaribe y el Gobierno está revisando todas estas situaciones para, especialmente en el caso de Air-e, tomar unas decisiones. El problema de la crisis energética viene desde tiempo atrás y se ha venido agudizando con las altas tarifas que han venido pagando los usuarios de la región Caribe”, precisó el superintendente.
Además de la percepción del funcionario de control, el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, también dejo ver su concepción sobre esta determinación, al afirmar que “es crucial que las decisiones del Gobierno nacional no solo intervengan, sino que garanticen un servicio estable”.
La intervención del Gobierno a Air-e será una solución solo si cuenta con recursos y se ejecuta con responsabilidad y transparencia. La crisis es financiera: kW altos, deudas acumuladas, altas pérdidas y deterioro de infraestructura que estamos pagando. Urge repensar el modelo”, expresó el mandatario departamental.
Adicional a lo mencionado anteriormente, también destacó que “con la intervención no podemos repetir los errores anteriores, donde la calidad del servicio sufrió y el sistema eléctrico se deterioró, lo que causó altas pérdidas técnicas y fraudes”, asegurando que “es vital contar con recursos para recuperar la infraestructura y garantizar la mano de obra”.
La solicitud de intervención que hizo Air-e al Gobierno nacional tuvo que ver con la crisis financiera que presentan, debido a las deudas que tienen con ellos y que a la par mantienen con otros actores como lo son los proveedores de energía.
En ese sentido, la empresa también había revelado que tiene deudas por cobrar por 1.85 billones de pesos relacionadas con la facturación por la prestación del servicio, la opción tarifaria y los subsidios para los estratos 1, 2 y 3. Esto se suma al incremento de las tarifas de energía en bolsa, pues Air-e asumió costos de 876.000 millones en 2023, una cifra mucho más alta a los 145.000 millones de pesos reportados para 2022.
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Informe y redacción: Luis Ángel Terán
