La escena se dio en el partido que ese club argentino sostuvo por Copa Libertadores ante Carabobo de Venezuela, ganándolo el Pincharrata y clasificando de primero a los octavos de final.
Por: Iván Peña Ropaín.
Antes de escucharse el pitazo inicial en el estadio Jorge Luis Hirschi, en la ciudad de La Plata, Argentina, donde Estudiantes jugaría ante Carabobo por la última fecha en su grupo A de Copa Libertadores, se le rindió un sentido homenaje a Juan Ramón “la Bruja” Verón, quien falleciera a sus 81 años la tarde del martes anterior.
Entrelazados en un abrazo, en la ‘bomba central’ se reunieron los jugadores inicialistas de ambas escuadras, así como el referí central, mientras en las gradas los hinchas del rojiblanco argentino coreaban “Bruja…Bruja…Bruja”.
El sentido homenaje fue de parte de una institución en la que la Bruja dejó vestigios importantes como un tricampeonato en línea en la Libertadores, registro dado en los años 1968 ante Palmeiras de Brasil, 1969 frente a Nacional de Uruguay y 1970 contra Peñarol de Uruguay.
Y, junto a compañeros de aquel magnífico plantel, llevó también a la gloria mundial a Estudiantes de La Plata al ganar la Copa Intercontinental, derrotando en una final de ida y vuelta al portentoso Manchester United, dando la “vuelta olímpica” en suelo inglés.
